Más Información
Nació en la localidad de Alise-Sainte-Reine, antiguamente llamada Alesia, en una familia pagana noble. Se convirtió al cristianismo en su juventud y consagró su virginidad a Cristo.
Su historia cuenta que Olibrio, el gobernador romano de la Galia, se enamoró de Regina y quiso casarse con ella. Sin embargo, ella rechazó sus pretensiones, declarando su fe en Cristo y su deseo de permanecer virgen. Esto enfureció a Olibrio, quien la sometió a tormentos para hacerla renunciar a su fe.
Según el "Martyrologium Hieronymianum", una antigua lista de mártires cristianos, Regina sufrió varios tipos de tortura:
"Regina, virgen y mártir, en Autun, quien bajo el gobernador Olibrio, después de la cárcel y el potro, fue quemada con antorchas y finalmente decapitada."
La tradición sostiene que Regina mostró una fortaleza extraordinaria durante su martirio, lo que impresionó a muchos testigos e incluso llevó a conversiones. Se dice que antes de su muerte, tuvo una visión de la cruz y una paloma, simbolizando su inminente victoria y unión con Cristo.
1. Modelo de virtud: Regina es venerada como un ejemplo de pureza, castidad y fidelidad a Cristo, incluso frente a la persecución y la muerte.
2. Patronazgo: Es considerada patrona de los pobres, los torturados y las víctimas de abuso. También se le invoca contra la ignorancia, la pobreza y el envenenamiento.
3. Devoción local: En Alise-Sainte-Reine, su lugar de nacimiento y martirio existe una fuerte devoción local. Una basílica fue construida en su honor en el siglo IX.
4. Inspiración artística: Su historia ha inspirado varias obras de arte, incluyendo pinturas, esculturas y vidrieras en iglesias de toda Francia.
5. Peregrinaciones: Durante siglos, su tumba ha sido un lugar de peregrinación, especialmente para aquellos que buscan curaciones milagrosas.
El historiador francés Jacques Dalarun, en su obra "La Sainte et la Cité: Micheline de Pesaro", menciona a Santa Regina como un ejemplo de las santas vírgenes y mártires cuyas historias fueron ampliamente difundidas en la Edad Media, contribuyendo a la formación de modelos de santidad femenina.