SE LE FESTEJA HOY
El polémico San Cucufato, amárrale los testículos para encontrar objetos perdidos
¿Otra vez se te perdieron las llaves? Checa la oración para que no te vuelva a pasar
(Foto: X)
Si alguien “disfruta los martirios” es sin duda San Cucufato, al que recordamos este 25 de julio por ser el protector de los objetos perdidos o conceder algún deseo.
Sin embargo, este no es un santo normal ya que para lograr que aquello que perdiste aparezca, casi de inmediato, necesitas mucha fe y “castigarlo”.
Pero antes de contarte el rito especial de este hombre de fe, te contaré algo de su historia para que entiendas por qué debes “maltratarlo”.
Lee también: Oración para Santiago Apóstol este 25 de julio, ¿de qué me protege?
Nacido en Escilio, provincia romana de Cartago, en el año 270, predicó el cristianismo por la península ibérica principalmente en la ciudad de Ampurias, que actualmente se conoce como Cataluña.
De origen africano, San Cucufato o Cucufate, fue enviado a Mauritania a aprender letras humanas, ya que su familia era de buena posición económica.
Al abrazar el dogma de Jesús, avanzó en sus estudios espirituales a tal grado de desear el martirio por lo que hizo diversas obras para llamar la atención de las autoridades romanas que gobernaban esas tierras quienes perseguían a los cristianos.
Fueron tres prefectos romanos los que tuvieron en sus manos la vida de este santo, sin embargo, pese a las torturas a las que fue condenado no murió ya que el todopoderoso lo salvó y dio testimonio de su poder.
El primero de ellos fue Daciano, al que Cucufato espero en Barcelona, donde fue delatado por sus obras de caridad en nombre de Dios, quien lo encarceló y posteriormente, según la leyenda, le abrieron el vientre y le sacaron las tripas, pero él se las metió de nuevo dentro del abdomen que se cosió con un cordón.
Ante esto, el sentenciado fue entregado al prefecto Galerio para ser torturado. Este romano profesaba una intensa rabia contra los cristianos por lo que doce robustos soldados, lo azotaron con uñas de hierro y con los escorpiones lo despedazaran hasta que le quitaran la vida.
Luego aplicarle por un tiempo considerable este tomento, el cuerpo de Cucufato estaba prácticamente despedazado, ahí el poder de Dios atacó a los verdugos hasta arrebatarles la vista y Galerio cae muerto. El santo se curó magníficamente.
Maximiano fue nombrado sucesor de Galerio y para cobrar venganza ordenó a los verdugos asar cruelmente al mártir en las parrillas y, para aumentar la tortura, untar el cuerpo asado con vinagre y pimienta. Cucufato durante el tormento entona salmos al Señor y es sanado repentinamente, mientras los verdugos pierden la vida en la hoguera.
(Foto: X)
Debido a que el prefecto ve este milagro como un acto diabólico, ordena que Cucufato sea metido a unas llamas más grandes, pero está no quema y permanece intacto. Una nueva flagelación es ordenada al día siguiente, sin causar efectos físicos en el condenado. Sin embargo, el romano fallece cuando la carroza en la que viajaba se incendió.
Finalmente, un nuevo prefecto Rufo, tomando en cuenta lo que sucedió con sus predecesores, no se atrevió a aplicar tormento alguno al mártir, sino que, pronunciando la sentencia contra Cucufato, ordena que lo asesinen atravesándolo con una espada.
Fue un 25 de julio que la ejecución se llevó a cabo en el campamento militar denominado Castrum Octavianum, en la actual población de San Cugat del Vallés, junto a Barcelona. Ahí finalmente fue llamado ante la presencia de Dios.
ORACIÓN Y RITUAL PARA ENCONTRAR OBJETOS EXTRAVIADOS
De acuerdo con la tradición oral, hay que aplicar martirio a San Cucufato para encontrar los objetos que hemos perdido y que son necesarios de encontrar a la brevedad.
Para comenzar el rito primero deberás recitar las siguientes líneas:
“San Cucufato, San Cucufato, lo que más te duele te ato, (procedes a amarrar con un cordón un nudo en los testículos, huevos o cogones. Si no tienes una imagen menciona el lugar donde fue atado, hasta que no pueda encontrar (aquí debes de pedir lo que has perdido y que quieres encontrar) no lo tendrás desatado.
¡Oh, San Cucufato! Patrono de los que buscan cosas perdidas, te pido que me ayudes a encontrar lo que he perdido.
Mira con bondad mi dolor y mírame con compasión, para que encuentre pronto lo que he perdido. Por tu intercesión, yo encontraré lo que he perdido. Te lo pido por la bondad de tu corazón. Amén”.
Aquí hay otra versión de la oración:
“Cucufato, santo cristiano que predicó por España alrededor del siglo III d.C. Se dice de San Cucufato que es un santo que concede deseos o al menos un santo al que hacerle Peticiones”.
(La fórmula es tomar un trozo de tela o listón para hacerle un nudo y después se debe guardar el trozo anudado).
Entonces se dice:
“San Cucufato los cojones te ato…”. (Mencionado los objetos que deseas hallar, tras esto concluyes diciendo:
” … si no me lo concedes no te los desato”.
El nudo seguirá en el trozo de tela hasta que no se haya cumplido el deseo formulado.
San Cucufato es patrón de los jorobados y de los pequeños robos, algunas fuentes aseguran que su celebración litúrgica es el 27 de julio. Espero que su don te sirva.