Taxista platica dolorosa experiencia de un accidente y cómo libró el bote

Manejar un auto en la Ciudad de México es casi una aventura extrema; cerrones, motociclistas que en ocasiones no respetan el reglamento, peatones distraídos, en fin, toda una combinación para que haya una considerable cantidad de accidentes viales.

Uno de ellos fue en el que se vio involucrado, hace seis años, nuestro amigo “Misterioso”, quien nos compartió su dolorosa experiencia.

“Iba yo por la colonia Martín Carrera, después de dejar un pasaje. Ahí circulan muchos ‘vochos’ particulares que hacen las veces de servicio de transporte sin tener placas, y son una amenaza.

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“Al salir para la avenida principal, uno de esos ‘taxis-vochos’, (que no sé quién los apoye), venía de bajada y a toda velocidad y me chocó.

“Al chocarme, desvió su camino contra un árbol, el cual detuvo su carrera, por lo que me salí a ayudar.

“La sorpresa fue mayúscula, pues el chofer era un jovencito de no más de 17 años y llevaba como pasajera a una señora. Me dolió ver al chavito con sangre en la cabeza y a la señora con el pie sangrando.

“Llamé a mi seguro, llegaron dos ambulancias y si no fui a parar a la cárcel fue porque la señora declaró que el chofer venía como loco y que no le hizo caso a sus súplicas de ir más despacio.

“La verdad fue muy doloroso, porque la gente de ese lugar está en manos de cafres; además, tuve que pagar el deducible para reparar mi taxi”.

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