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CIUDAD DE MÉXICO.- Óscar, el hombre hallado muerto en un horno de la sucursal Bisquets Obregón, en Azcapotzalco, no murió de un infarto, como informó la cadena, sino de golpes que le propinaron en el abdomen y el tórax.
De acuerdo con el acta de defunción dada a conocer, se indica como causa del deceso “traumatismo en tórax y abdomen”, es decir, lesiones graves derivadas de golpes contusos o heridas profundas.
Fue el pasado 8 de marzo, cuando el cuerpo de este hombre, quien era encargado de mantenimiento, se halló al interior de un horno de pan en la sucursal ubicada en Camarones 387 y Eje 3 Norte.

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Ese día la empresa emitió un comunicado informando que su trabajador sufrió un infarto al miocardio “que lo dejó tendido en el suelo donde se le encontró”.
Esta versión fue reforzada por las autoridades de la alcaldía, quienes precisaron que, de acuerdo con reportes de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), Óscar tuvo un infarto mientras realizaba labores rutinarias de mantenimiento al interior del restaurante.
A ocho días de este suceso, no hay ninguna persona detenida y esta sucursal de Bisquets Obregón sigue operando de manera normal.
¿Qué es un traumatismo de tórax?
Un traumatismo torácico es una lesión grave en el tórax, bien sea por impactos de golpes contusos o por heridas penetrantes. El traumatismo torácico es una causa frecuente de discapacidad y mortalidad significativa, la principal causa de muerte después de un trauma físico a la cabeza y lesiones de la médula espinal.
Los traumatismos torácicos pueden afectar a la pared ósea del tórax, la pleura y los pulmones, el diafragma o el contenido del mediastino.
Debido a potenciales lesiones anatómicas y funcionales de las costillas y de tejidos blandos incluyendo el corazón, pulmón o grandes vasos sanguíneos, las lesiones torácicas son emergencias médicas que si no son tratadas rápida y adecuadamente pueden dar como resultado la muerte.