Mamá con su niña, entre los muertos tras fuerte derrumbe de panteón en Cuernavaca

MORELOS.- El panteón de La Paz de Cuernavaca volvió a derrumbarse y sepultó dos viviendas en la colonia Los Pilares, lo que dejó como saldo por lo menos cuatro personas lesionadas y tres personas bajo los escombros sobre la calle Lirio. 

Tanto el cementerio como las viviendas están construidas en la orilla de lo que hace algunos años fue una mina de arena. Así, el campo santo está en la parte superior y los domicilios en la base de un paredón de al menos 15 metros de altura, que por cierto en cada temporada de lluvias se deslava. 

Incluso la semana pasada hubo un desgajamiento en la misma zona cercana a la autopista México- Acapulco, pero este nuevo derrumbe arrastró toneladas de tierra, piedras y hasta tumbas que estaban al límite provocando que dos familias quedaran bajo los escombros, ya que las casas se vinieron abajo. 

 #ÚltimaHora  Mamá con su niña, entre los muertos tras fuerte derrumbe de panteón en Cuernavaca. Imágenes de Carlos de la Fuente  Únete a nuestro GRUPO de TELEGRAM https://t.co/ngoeu4nm29 pic.twitter.com/gzxLB4wSqk

— El Gráfico (@elgmx) September 14, 2022

Alrededor de las 10:30 horas de este miércoles los vecinos llamaron al 911 para pedir ayuda; la radio operadora recibió por lo menos 10 llamadas describiendo lo que había sucedido. 

Los primeros en llegar fueron elementos preventivos y paramédicos, quienes atendieron a tres adultos y una menor de edad que ya estaban siendo auxiliados para salir de los escombros por los mismos residentes; todos ellos fueron llevados a un hospital. 

Los habitantes afirmaron que había más víctimas enterradas así que personal de la Sedena, Coordinación Estatal de Protección Civil (PC) y PC municipal, comenzaron a retirar la tierra, ladrillos y estructura en el lugar.

Casi cinco horas después, encontraron a una menor de 17 años y a su madre sin vida. Más tarde, cerca de las 7 de la noche, fue localizado el cadáver de Doña Sofía, de 46 años.

El titular de la Coordinación de PC Morelos, aseguró que al inicio de la temporada de lluvias, como cada año, ya se les había notificado de que debían de evacuar debido a que se encuentran en una zona de alto riesgo, pero ninguno de todos los habitantes de la zona accedieron a dejar sus viviendas. 

“A veces las personas piensan que son cosas que no les van a pasar; que solo suceden en otras partes y que no sucederán. Pero las recomendación es que todos los ciudadanos sigan las recomendaciones de la coordinación de Protección Civil para resguardar sus vidas”, dijo el funcionario estatal durante los trabajos.  

La historia del panteón que se derrumbó 

El 20 de agosto del 2015, ya se había registrado el derrumbe de una parte del panteón que cayó sobre una vivienda en la misma zona.

Sin embargo, la cantidad que cayó esa ocasión fue mucho menor y no se reportaron daños mayores en la casa o en el campo santo. Esa ocasión el área quedó acordonada, pero después se reabrió a los ciudadanos.  

Ahora, las autoridades municipales van a revisar este lugar para saber en qué condiciones se encuentran y qué riesgo existe de que colapse otra zona. 

El alcalde, José Luis Uriostegui Salgado aseveró que todo esto se supervisará hasta que concluyan las labores de rescate y aseguramiento de la zona afectada.   

“Estoy esperando al director del panteón para dar las instrucciones correspondientes. En la zona de lamparero de arriba hay zonas reblandecidas y se ha acordonado para que ya no se coloquen más turbas en el lugar y se vuelva a generar una fractura”, explicó al visitar el área afectada por el derrumbe. 

Sin embargo, no se sabe si recientemente se colocaron nuevas tumbas en ese lugar pues durante el deslave de este miércoles. Y es que algunos sarcófagos, lápidas y cruces también cayeron al vacío.  

“Yo vi como se derrumbó el paredón y cómo quedaron las personas afectadas. Ya van aproximadamente cuatro derrumbes en los últimos seis y siete años, pero la gente no va a salir de ahí porque son sus propiedades de ellos y no tienen a dónde ir”, comentó un residente.  

Y es que, a pesar del riego que representa habitar esta zona, los ciudadanos no han decidido abandonar el lugar a pesar de que cada temporada de lluvia comienzan a ser más comunes los deslaves en esta mina, pero también en otras que se encuentran en la zona metropolitana y oriente de Morelos.