Funcionario ebrio lo arrolló
A dos años del choque, muerte de estudiante del IPN sigue impune en Edoméx
El percance le ocasionó un traumatismo en la cabeza, que a la postre le causó la muerte
Foto: Archivo El Gráfico
CHIMALHUACÁN.— Dos años han pasado desde que el estudiante del IPN, Pablo Yaollin, fue arrollado presuntamente por trabajadores alcoholizados cuando regresaba a casa con su papá en una moto y a la fecha la investigación ha sido relegada.
“Yao” era estudiante de la Vocacional 9, donde quería graduarse como ingeniero en Robótica, pero su sueño terminó el 30 de abril de 2017, cuando una camioneta chocó la motocicleta en la que viajaba con su papá, Pablo García, en el cruce de Corregidora y Doctor Río de la Loza, a unas cuadras de su casa, en el Barrio Acuitlapilco.
El percance le ocasionó un traumatismo en la cabeza, que a la postre le causó la muerte. El padre, quien terminó en silla de ruedas, asegura que el responsable conducía una Windstar roja, placas MCT2078, en la que viajaba el entonces director general de Gobierno municipal, Óscar Huerta Olivares, y sus familiares, quienes aún son funcionarios.
Según su testimonio, el vehículo circulaba con las luces apagadas por el carril confinado del Mexibús y se pasó el alto a gran velocidad.
