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El llamado fue ignorado hasta hoy por la tarde cuando el olor obligó a los habitantes a asomarse por las ventanas del coche.
Dentro, vieron el cuerpo de un hombre que yacía recostado en el asiento del copiloto.
Por eso avisaron a los policías que al llegar al lugar indicaron que el hombre estaba muerto.
Aunque los residentes desconocen a quién pertenece el taxi, en las ventanillas mostraba un tarjetón a nombre de Arturo Rodríguez.
Los agentes indagan las causas de la muerte del hombre y si el cadáver pertenece a la misma persona registrada en el tarjetón.
Al lugar no se acercaron personas que lograran reconocer al hombre. Por eso fue trasladado como desconocido al anfiteatro de la agencia ministerial.
