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El hombre, de 29 años, conocido por los vecinos, yacía detrás de la lona de un puesto ambulante instalado en el lugar.
Tras encontrarlo, los testigos intentaron ayudarlo, pero al ver sus heridas y darse cuenta de que no respondía, los habitantes pidieron ayuda de policías y paramédicos.
En el lugar fue confirmada la muerte Ricardo. Aunque no se informaron las causas por las que fue atacado, se sabe que sus homicidas lo golpearon y le provocaron una lesión mortal en la cabeza.
Además de los golpes, el cuerpo presentaba heridas de quemaduras en la cara y las manos.
Los policías que atendieron el caso supieron que hace unos meses el hermano de Ricardo fue asesinado en la misma alcaldía.
Hasta ese momento, los agentes desconocían quién era el responsable de la muerte del hombre que solía rondar las calles del barrio en busca de fiesta y alcohol.
