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(Foto: Sergio Trejo)
Asesorados por el chef Daniel de la panadería Gato Pandilla que se hizo famosa por elaborar los “michipanes”, los enmascarados comenzaron la producción.

(Foto: Sergio Trejo)
Portando mandiles y con las manos bien lavadas integraron la harina con todos los ingredientes para obtener una suculenta masa.
Posteriormente dieron forma a los panes, con todo y huesos, para meterlos al horno. Luego de un tiempo quedaron listos.

(Foto: Sergio Trejo)
Ante esto “El Amo de los Ocho Ángulos” compartió su sentir al finalizar este trabajo del cual quedó muy satisfecho.
“Sin duda alguna la elaboración del pan de muerto es una tradición que hago año con año, uno no debe dejar morir las tradiciones y menos una tan emblemática para nuestro pueblo mexicano, por eso siempre me acompaña mi hijo, el Hijo de Octagón y mi ahijado el Potro de Acero, hacer estas actividades nos llena de emoción y mucha diversión, porque vamos viendo paso a paso en equipo este gran trabajo, hasta ver el exquisito y sabroso resultado”. finalizó el ídolo de multitudes.
A continuación compartimos con ustedes cómo Octagón y sus muchachos elaboraron este delicioso pan.
1. Los ingredientes principales son harina, sal, levadura, mantequilla, como materia prima seca, también lleva huevos, leche, agua de azar y azúcar.
2. Con los ingredientes listos se ponen todos los ingredientes en la batidora para que tenga este proceso de 15 a 20 minutos.
3. Con los ingredientes batidos se procede a dividir la masa y se pesa en bascula para tener porciones exactas y panes del mismo tamaño.
4. Procede el amasado y darles forma de bolita para dejar reposar y fermentar por dos horas en la charola, para ser colocados en el espiguero.
5. Ya fermentado, se procede hacer los huesitos, poniendo agua a los panes, ya hay masa aparte con harina para así tomar una porción en forma de tirita y con los dedos de la mano no se hacen la forma de huesitos con la presión de los dedos.
6. Listo el proceso se pone a hornear
7. La horneado se procede a untar el pan con mantequilla, con la ayuda de una brocha, para después ser bañados con azúcar.
8. Ahora sí a degustar un delicioso pan de muerto.