Fiscal General de Morelos se aferra a cargo; desafía al gobernador

CUERNAVACA.— Desde el pasado 16 de octubre, el Fiscal General del Estado, Uriel Carmona Gándara, solicitó un amparo ante la posibilidad de que los diputados pudieran aprobar su destitución, pues varios de ellos se pronunciaron públicamente que fuera removido; sin embargo, la justicia federal le negó la protección solicitada.

Aunque el procurador insistió y promovió tres amparos más bajo el argumento de que la dependencia a su cargo ya es autónoma, al final los resultados fueron los mismos. 

Sin embargo, durante esta misma semana, las posibilidades de su remoción aumentaron, pues el Poder Ejecutivo envió una solicitud formal para que los diputados lo cesen del cargo, debido a que jamás aplicó los exámenes de control y confianza, tal como lo establece la Ley Nacional de Seguridad. 

“Los diputados deben ya pronunciarse, lo que deben de hacer es analizar si existen las causas suficientes como causas graves para la remoción. Desde el punto de vista del Ejecutivo, sí existen elementos para esos efectos”, dijo Samuel Sotelo, Consejero Jurídico del Gobierno de Morelos.

Los diputados de Morelos no se han puesto de acuerdo para abordar el caso y el tema provocó que la sesión de este miércoles se suspendiera, por lo que se espera que durante la reunión de la Junta Política y de Gobierno se analice y se llegue a un consenso para agilizar el asunto.