SUSTITUÍDO POR UN ESTADIO
”El hotel más fino del mundo” fue convertido en escombros
Dio fama mundial a Las Vegas
Foto: (AP)
Seis meses después de su cierre definitivo, anoche por la madrugada fue demolido uno de los símbolos de lujo y sofisticación que dieron fama mundial a Las Vegas: el hotel Tropicana.
Con 67 años de vida, el Tropicana será sustituido por un estadio profesional de beisbol, aunque la ciudad aún no tiene un equipo de Grandes Ligas.
La implosión (una explosión hacia dentro del edificio) fue un reto logístico para la ciudad, ya que el histórico lugar se encontraba en el centro del Strip, la calle estelar de la diversión sin parar de Las Vegas.
Lee también: Sandra Cuevas y Sofía Yunes: El lado oscuro de ser políticas y compartir su intimidad en redes
Por los pasillos, restaurantes, casinos y habitaciones desfilaron las más grandes estrellas de Hollywood, mafiosos legendarios y millones de soñadores en busca de fortuna.
En el año 1957 el Tropicana abrió sus puertas, autoproclamándose como el "hotel más fino del mundo". Con un costo de construcción de 15 millones de dólares, el complejo se distinguió desde el primer momento por su elegante arquitectura de estilo colonial cubano y sus exuberantes jardines tropicales, que le valieron el apodo de "Tiffany del Strip".
De hecho, justo cuando Cuba cerraba sus puertas al turismo estadounidense tras la revolución de Castro, el Tropicana ofrecía un pedacito de La Habana en medio del desierto de Nevada. Su espectáculo insignia, el "Folies Bergère", importado directamente desde París, se convirtió en uno de los shows más longevos de Las Vegas, manteniéndose en cartelera durante casi 50 años, desde 1959 hasta 2009.
Pero como muchos establecimientos de la época dorada de Las Vegas, el Tropicana tuvo sus vínculos con la mafia. En 1957, el gángster Frank Costello fue baleado en Nueva York; en su bolsillo se encontró un papel con las ganancias del casino anotadas meticulosamente. Este incidente provocó una investigación que reveló la participación del crimen organizado en la administración del hotel.
Foto: (AP)
Entre las anécdotas más curiosas del Tropicana destaca la vez que Eddie Fisher, en pleno romance con Elizabeth Taylor y aún casado con Debbie Reynolds, realizó su debut en el hotel en 1958. La prensa sensacionalista acampó durante días en el lobby, convirtiendo el hotel en el epicentro del escándalo del año.
El Tropicana también fue pionero en muchos aspectos: fue el primer hotel de Las Vegas en tener un servicio de televisión a color en todas sus habitaciones, y su piscina, con su famosa cascada y gruta artificial, estableció un nuevo estándar de lujo en la ciudad.
Durante la década de los 60, el hotel se convirtió en el lugar preferido del trío Rat Pack: Frank Sinatra, Dean Martin y Sammy Davis Jr. frecuentaban sus instalaciones después de sus shows en otros hoteles. Se cuenta que en una ocasión, Sinatra y sus amigos jugaron una partida de póquer que duró tres días consecutivos en una suite privada.
En los años 80, el hotel vivió una transformación significativa con la adición de una torre de 22 pisos con vista al Strip. Para mantener su esencia tropical, se incorporó un jardín con cientos de palmeras reales traídas especialmente desde Florida.
Una de las historias más peculiares ocurrió en 1971, cuando un empleado de mantenimiento descubrió accidentalmente un sistema elaborado de escuchas instalado en varias suites del hotel. Nunca se supo oficialmente quién las instaló, aunque las especulaciones apuntaban tanto al FBI como a la mafia.