El sexo es una de las áreas de la vida de las personas que no se puede guardar en un cajón sólo porque el cuerpo tiene limitaciones. Las personas con discapacidad también tienen libido, deseos sexuales y necesidades emocionales, sexuales y de pareja.
En este aspecto, España se pone a la vanguardia e implementa la figura de asistente sexual, cosa que ha generado mucha polémica en el mundo. Se trata de una persona que después de atravesar un proceso de capacitación, pueda acompañar a varones o mujeres con discapacidad, y dar un servicio sexual, afectivo y erótico.
Muchos lo ven (sobre todo los que no son discapacitados) como un simple contrato de prostitución, pero la realidad es que el principal problema que denuncian los expertos es la idea preconcebida que tiene la sociedad de considerar a las personas discapacitadas como seres asexuados, a los que el sexo no les importa de la misma manera que al resto.
Silvina Peirano es la creadora del servicio de formación de asistentes sexuales, Sex Assistant, en Barcelona y pretende buscar exigir la necesidad de legislar esta figura como una opción sexual y piden que las necesidades afectivas y sexuales de este colectivo dejen de ser un tabú.
Para Tandem Team Barcelona, una asociación sin ánimo de lucro que vela por mejorar la vida de los hombres y mujeres con diversidad funcional, no se puede separar la sexualidad de la identidad de un ser humano, ya que cuando se le niega la condición sexuada se le está negando a la vez como persona.
“No tenemos la facilidad de ir a un bar, tomar una copa y ligar. Por desgracia, los cánones de belleza son los que son y nosotros no estamos dentro del prototipo de buenos amantes", cuenta Soledad Arnau, quien utiliza silla de ruedas desde que nació y es investigadora en el Departamento de Filosofía de la UNED y además colabora con esta causa.
Y es que en numerosas ocasiones son los mismos padres quienes ven como la única alternativa para ayudar a aliviar las necesidades sexuales de sus hijos, la prostitución, con las graves consecuencias que esto puede acarrear para ambos.
De aquí que la comunidad de personas con discapacidad busca distinguir entre asistencia personal y asistencia sexual.
Ambas igualmente dignas de ser regularizadas y legisladas.
Montse Neira es una de las precursoras de este debate y desde 1989 de las pocas prostitutas, en España, que ha atendido clientes discapacitados y ella dice que: "El verdadero problema viene de muchas familias que no entienden que sus hijos o hijas tienen estas necesidades y tratan el tema de la sexualidad, la masturbación y los juegos sexuales desde un punto de vista negativo. Como si fuera malo querer descubrirse a sí mismo o tener curiosidad por saber lo qué se siente".
Por ello, si desde niños les tratan el tema de la sexualidad como un tabú, creen que el sexo no es para ellos y toman conciencia de que ese mundo de placeres nunca lo podrán disfrutar. Por ello, la urgencia de formación, tanto para los asistentes como para los discapacitados. Se les considera como niños eternos y debemos acabar con ese prejuicio.
Los asistentes sexuales pues, tienen que ser educados desde el punto de vista de los derechos humanos, la discapacidad y la sexualidad. Saber cómo estimular a clientes que no tienen sensibilidad genital con caricias y besos en otros puntos erógenos y entender qué es lo que quiere alguien, por ejemplo con parálisis cerebral, que no puede hablar.
Tip*
Las sesiones (2012). Fue la primera película en abordar el tema de la asistencia sexual a personas discapacitadas. En esta obra basada en un caso real, un hombre tetrapléjico, de 38 años, solicita los servicios de una asistente sexual para perder su virginidad.
Datos
Países como Dinamarca, Holanda, Bélgica y Alemania lo consideran un servicio más dentro del sistema sanitario y Suiza es el único que ha llegado a regularizar la ocupación de forma oficial.
De lado
Es una postura excelente para la felación. No tiene mucha complicación para realizarse y sí da mucho placer. Él tiene una visión inigualable para disfrutar del sexo oral. Para hacerla, ella se coloca de lado mirándolo, mientras se mete suavemente el pene en la boca. Puede colocar una almohada para no tener que soportar el peso de la cabeza mucho tiempo.
El sacacorchos
Para hacerla, mientras él está de pie, ella se arrodilla y sujeta el pene con ambas manos. Para comenzar la felación y hacer honor al nombre de esta postura, ella mueve la boca de lado a lado.
Para perfeccionar la técnica, ella debe mover las manos de derecha a izquierda como si estuviera ajustando el objetivo de una cámara fotográfica.