Crece desilusión de vecinos en la zona del Mexicable

En un letrero que pende en la entrada del deportivo donde se colocó pasto sintético durante la inauguración del Mexicable, y que fue quitado dos días después, se lee “cerrado por remodelación”.

Vecinos esperan que sea reabierto, pues es el único espacio por la zona con el que cuentan para realizar alguna actividad recreativa. Se habían acostumbrado a las condiciones del lugar, siempre de tierra.

Carlos, de 21 años, vecino de la colonia Tablas del Pozo, cuenta que este deportivo siempre estuvo en el abandono.

“El encanto de que lo empastaran sólo duró dos días, lo quitaron —el pasto—, dicen que lo van a volver a poner pero no saben cuándo”.

En la entrada del deportivo, trabajadores comentan que el pasto sólo estaba sobrepuesto. Las máquinas están trabajando el terreno, para volver a colocarlo. 

SIN SEGURIDAD. “Aquí estamos olvidados”, dice Paola, vecina de La Cañada, la última estación del Mexicable.

La avenida San Andrés de la Cañada, donde ella habita, siempre había estado llena de vehículos abandonados que servían de guarida para los delincuentes. “Ahora la limpiaron, la pintaron, pero en la avenida paralela, las condiciones siguen siendo las mismas”.

Ella fue una de las personas que el pasado jueves quedó varada en las alturas cuando el Mexicable se detuvo debido a una falla eléctrica en su recorrido de la estación el Mezquite hacia Hank González. 

“Nos dijeron que en cinco o 10 minutos estaría avanzando, pero en el aire duramos 40 minutos y después comenzó a avanzar muy lento”.

QUEDAN SORDOS. Doña Juana es vecina desde hace 43 años en la colonia Tablas de Pozo, a unos metros de donde fue colocada la subestación eléctrica para el servicio del Mexicable.

Menciona que cuando ésta es prendida, el ruido que se genera es ensordecedor, además de que se genera una gran contaminación debido al humo que sale al encendido de la estación eléctrica.

“Es un transporte de primer mundo que nos pusieron aquí, pero en toda la colonia ni una luminaria de la calle funciona, todas están fundidas y la inseguridad es la misma”, dice la mujer.