Enfermedades y bacterias que puedes contraer en una alberca sucia

Bacterias, virus, parásitos que se transmiten por vía digestiva, hongos, conjuntivitis, enfermedades diarreicas, gastrointestinales y hasta hepatitis tipo A son afecciones que se pueden contraer al ingresar a una alberca que no tiene un buen mantenimiento o que ha sido contaminada como resultado de una sobrepoblación durante este periodo vacacional de Semana Santa.

De acuerdo con El Universal, especialistas coincidieron en que la mejor manera de contrarrestar estas infecciones es a través de una buena cultura de higiene, acudir a balnearios, centros acuáticos o playas en donde el agua esté en buenas condiciones y no actuar como contaminantes.

La forma de contagio en estos ambientes son por ingerir agua, contacto a través de la piel y por el aire que se respira alrededor de las instalaciones acuáticas, además de que el mal uso o exceso de químicos para el tratamiento del agua, son las principales causas que ponen en riesgo la salud de los usuarios.

Expertos en el tema, lanzaron una serie de recomendaciones antes de entrar a alguna piscina, tales como ducharse antes de ingresar al agua, no orinar dentro de ellas, no sonarse la nariz, no entrar con ropa de algodón, ni nadar cuando se tiene algún mal gastrointestinal.

En estas vacaciones protégete y evita enfermedades.