Nico Rosberg dejó la F1 para vender helados en Ibiza

Ser corredor de autos no es todo en la vida, por lo que el ahora ex piloto de Fórmula 1, el germano-finés Nico Rosberg, decidió ampliar su campo laboral y dedicarse... ¡a vender helados!

Así como lo leíste: El otrora volante de escuderías como Williams y Mercedes y después de 206 Grandes Premios en total, abrió desde 2014 junto a su entonces novia y ahora esposa, la diseñadora Vivian Sibols, la heladería Vivi’s Creamery, en Ibiza, donde se elaboran postres con ingredientes autóctonos de la isla.

“No hay un camino único. Valentino Rossi sigue ahí un año y otro y otro... Pero yo sentía que era lo que tenía que hacer. Y soy muy feliz con mi vida”, afirmó el campeón mundial del máximo circuito en 2016, cuando se retiró.

Un premio al romance con su mujer, de quien se enamoró a primera vista en Ibiza, donde ambos veraneaban de niños y donde nació el amor entre ellos: “Cuando teníamos ocho años jugábamos en el restaurante Cana Pepeta y él dice que allí se enamoró de mí”... Los dos se reencontraron en la isla en cuando tenían 18 años y no se volvieron a separar.

Pese a sus compromisos como corredor de autos, Rosberg estuvo en la inauguración frente al Mercado Viejo. Un lugar privilegiado desde donde se ve la muralla que rodea D’Alt Villa, Patrimonio Mundial de la Unesco desde 1999.

VERSÁTIL. Ah, pero eso no es todo, pues Nico se dedica ahora también a ser analista deportivo en el canal británico Sky, en el que aprovecha su experiencia en el Gran Circo y hablar seis idiomas para hacer comentarios de cada carrera.

"Me encanta, es muy divertido y me permite estar cerca de mi mundo. Me gusta hacer televisión, pero no voy a comentar todas las carreras. Este año haré unas ocho, las que me más atraen. Además, ahora estoy también trabajando como inversor”, afirmó el inquieto corredor de autos.

Y sí, tiene otras inversiones, pues también se dedica al sector inmobiliario, donde junto con su esposa “compramos apartamentos y Vivian es quien se ocupa de la reforma y la decoración. Luego los alquilamos. Es un negocio que nos va muy bien porque hay pocas personas que pueden hacer una renovación tan fantástica como ella”, asegura.