Con los pies bien ardientes
(Foto: Archivo, El Gráfico)
Hola, mis amores, espero que su miércoles vaya de maravilla, que estén felices leyendo este periódico y mis palabras puedan aumentar esa felicidad.
Yo estoy emocionada porque iré a Querétaro a grabar una nueva escena, con nueva productora. Échenme porras, para que quede hermosa.
Hoy quiero platicarles mi experiencia al hacer un nuevo video de footjob, ese fetiche de masturbar al hombre con los pies.
Como ya saben, tengo un grupo de whatsapp, ahí envío mis videos y fotografías sin censura, además pueden hacer pedidos especiales, es decir videos como ustedes los quieran, aunque aclaro que me reservo a hacer solamente los que me agraden, pues no por recibir dinero haré algo que no me gusta o me incomoda.
Bueno, pues un joven del grupo me pidió un video sobre footjob, y creo que fue mi primera experiencia grabada, dónde debo durar cierto tiempo o acomodarme de cierta manera para que el video salga estupendo, no es lo mismo a gozar de una noche de pasión, donde no hay poses ni requerimientos, solamente disfrutar al máximo.
Lo que este chico me pidió fue tener las uñas de los pies pintadas de color llamativo y que la toma fuera hecha por el hombre, para así poder observar mis lolas y que lograra hacerlo terminar.
Así que me pinté las uñas negras con destellos de colores, morado, rosa, verde y amarillo. Comencé con un oral, él grabando desde arriba y yo en posición de perrito lamiendo, lo metía, chupaba y succionaba, pasaba mi lengua por la puntita y volteaba hacia la cámara, ya cuando pude verlo bien duro, comencé a acariciarlo con mis pies.
Me acosté boca arriba en sentido contrario a él para que mis pies quedaran justo en su cintura, comencé jugando con ellos, rozándolos por sus piernas y luego apretando a su amigo con mis dedos. A pesar de la saliva era un poco difícil que mis pies resbalaran por su miembro, así que recurrimos al lubricante, el cual se lo unté hasta dejarlo escurriendo y ahora sí comencé a masajearlo, con movimientos circulares, subía y bajaba, se la jalaba con los pies, estuvimos así por un rato.
Entonces empecé a sentir que mis muslos querían acalambrarse, le hice una seña para que parara de grabar y estiré mis piernas, ¡estaba comenzando a cansarme!
Yo había visto videos así y me parecía sencillo, pero al hacerlo me di cuenta que se necesita fuerza en las piernas para mantenerlas en forma de mariposa, pero elevadas, para hacer el trabajo, además el abdomen también hacía su esfuerzo al sostener las piernas en esa posición. Continuamos grabando y él decidió ayudarme jalándosela, mientras yo me masturbaba de frente a él, verlo me excitaba.
Luego, me puse en posición y seguí jalándosela con mis pies, mis piernas se sentían calientes y no eran de excitación, en verdad mi cuerpo estaba teniendo una actividad física como ejercicio. Pasaron casi 15 minutos y decidí que ya no podía más, así que le pedí que él me ayudara con sus manos.
Para alentarlo lo dejé que me observara dándome amor, me estuve tocando las lolas y todo mi cuerpo; él
sonreía y seguía haciendo su trabajo, cuando vi los movimientos que hacía con su mano supe que estaba a punto de terminar, así que le puse mis pies al frente para que lo hiciera ahí.
Me llenó los dedos y la parte de arriba de mis pies, así seguí con el masaje, exprimí hasta la última gota y cuando por fin terminamos, mandé un beso a la cámara y me despedí sonriente.
¡Los espero el miércoles!