DETIENEN A DOS MALANDROS
Psicóloga de Conagua esperaba el camión y muere en fuego cruzado entre policías y ladrones, GAM
Los comerciantes de la zona buscaron refugio para evitar ser heridos por las balas; todos se escondían menos Gabriela que esperaba el camión
(Foto: Armando Martínez, El Gráfico)
Cuando Gabriela “N” esperaba el camión fue alcanzada por una bala. La mujer de 27 años y de profesión psicóloga murió atrapada en una balacera entre policías y delincuentes.
Ayer, antes de las 8:00 de la mañana, dos hombres amagaron al conductor de una camioneta cargada con pollo en la calle Manzanillo, colonia Jardines de Guadalupe, en Neza, Estado de México. Con arma en mano, lo obligaron a entregar el vehículo.
Después escaparon a bordo de la camioneta de carga. En otro automóvil —un Aveo— viajaba un tercer cómplice de los presuntos hampones. Tras el robo de la unidad, la víctima dio aviso a los policías municipales. A unas cuadras de donde se cometió el atraco comenzó la persecución.
Al ver que los agentes los seguían cuando circulaban a bordo de la unidad de carga en Calle 19 y Avenida 1, los delincuentes decidieron abandonar la unidad y subieron al automóvil en el que su cómplice les abría paso.
Intentaban escapar, pero al llegar a la Avenida Central, en la colonia Joyas de Aragón, ya en la Ciudad de México, los asaltantes chocaron. Los tres descendieron del coche y enfrentaron a los uniformados. Según los testigos, las balas se escuchaban mientras que los hombres y oficiales corrían.
Los comerciantes de la zona buscaron refugio para evitar ser heridos por las balas. Todos se escondían, menos Gabriela, que esperaba el camión en la orilla de la banqueta. Fue ella la víctima de la balacera. Una bala impactó su cabeza y la mató antes de que alguien pudiera auxiliarla.
Su cadáver cayó ya en territorio de la alcaldía Gustavo A. Madero. Ayer por la noche su padre logró reconocerla en la agencia GAM 6 y confirmó que la joven trabajaba para la Comisión Nacional del Agua. Los agentes lograron detener a Carlos y Juan Pablo. El tercer cómplice logró escapar.