Tigres saca el cobre y aprovecha desventaja del Veracruz para marcar victoria

VERACRUZ.— Insólito. Irreal. Nunca visto. Día irreal coronado por una noche trágica. Al final, el marcador (1-3) a favor de Tigres sobre Veracruz es lo de menos, porque lo que pudo ser un acto de dignidad se convirtió en uno de infamia, de desunión, de bajeza para un equipo que quiere ser llamado ‘grande’.

¿Los jugadores de Veracruz le avisaron a los de Tigres lo que iban a hacer?, ¿Ricardo Ferretti dio la señal de marcarle gol a un equipo que no jugaba?. Los Tiburones guardaron el secreto de la mejor forma posible. Sólo los jugadores sabían lo que harían. A las 14 horas, se presentaron en el hotel de concentración para comer y descansar. Nadie habló. Ya sabían lo de los 18 millones. Ya sabían que Fidel Kuri dijo que pagará el lunes.

Pero sólo ellos sabían lo que realmente iba a suceder. A las 19:15, salieron de su hotel, entre porras y fotos de la afición. Se iba a jugar.

Fernando Hernández sonó su silbato a las 21:06 horas, la pelota se movió, los jugadores de Tigres también, pero los de Veracruz no... Todos entendieron que es su manera de protestar. Todos lo entendieron, menos los Tigres, que decidieron aprovecharse del momento. Eduardo Vargas y André-Pierre Gignac hicieron los goles, mientras los escualos claramente no querían hacerlo.

Y el problema no termina, las deudas continúan, y en el futbol mexicano no hay unión.