Si te gusta la fiesta brava, ya es tiempo de cambiar el chip para insertarte en una tendencia mundial de protección a los animales y exterminio de la crueldad en los espectáculos.
El reconocimiento de los seres sintientes no incluye únicamente a los animales de compañía —en su mayoría perros y gatos, sin descartar peces, tortugas o aves—, también considera a otras especies, como los toros.
En atención al debate sobre la prohibición de las corridas, la Ciudad de México se coloca a la vanguardia y encuentra un punto medio donde se preserva el espectáculo, pero se elimina el maltrato y muerte del astado.
Ayer, legisladores locales, el gabinete, organismos defensores de los animales, promotores de la fiesta brava cerraron filas con la propuesta presentada por la Jefa de Gobierno Clara Brugada: el espectáculo taurino libre de violencia. Una evolución necesaria en la tauromaquia.
A nivel internacional hay esfuerzos por modificar las corridas. Portugal cuenta con la tourada, donde los forcados —hombres vestidos con atuendos tradicionales— enfrentan cuerpo a cuerpo al toro para sujetarlo. Aunque no lo matan, sí lo lastiman con banderillas.
En la capital nacional se plantea terminar con toda posibilidad de dañarles. El planteamiento prohíbe el uso de banderillas, espadas, lanzas —solo se podrá utilizar capote y muleta— y el animal debe volver a su ganadería. No habrá piquetes ni sangre.
¡Ponte al tiro! Los toooritos son animales sintientes y merecen respeto a su vida. En la CDMX se les garantiza.
@guerrerochipres