obreras recorren grandes distancias
Peregrinan para ir a la chamba
Muchas costureras de empresas textiles son de otros pueblos, por lo que son apoyadas
Foto: César Gómez, El Gráfico
Amilcar Salazar
La próspera industria textil del estado cuenta con el apoyo de al menos 200 mujeres originarias de pueblos donde los caminos son muy angostos o de terracería como Calderas, San Nicolás Solís, San Francisco de Solís, La Cuadrilla o La Magdalena, entre otros, las costureras viajan diariamente (de ida y vuelta) a las fábricas a bordo de furgonetas de color blanco y de modelo reciente, propiedad de distintas firmas que subcontratan a la industria los servicios de movilidad de personal.
De acuerdo con los datos, las obreras ganan sueldos semanales por mil 052 pesos en efectivo y 182 pesos en vales de despensa, además cuentan con prestaciones adicionales a las de ley, como los servicios de comedor y transporte. No se les exige experiencia, sólo disponibilidad para rolar turnos. Dentro de su rango laboral, los ingresos pueden ser mejores, hasta en un 20%, en función de la empresa y temporada de contratación.
El ayuntamiento mexiquense de Temascalcingo de José María Velasco, incluido su vistoso Valle de Solís, tiene una historia de interés nacional en materia de migración, al haber sido beneficiario del Programa Bracero, que en 1942 firmó el gobierno mexicano con el estadounidense, a fin de apoyarlo con la mano de obra que requerían los campos del norte a raíz de la Segunda Guerra Mundial.