En medio del ajetreo de la preparación y las fiestas de fin de año, vale la pena darse unos momentos para reflexionar acerca de lo que significó para ti el 2018. La idea es reconocer tus acciones positivas y cómo esto contribuye a tu bienestar o avance en la vida. La intención debe ser voltear a ver eso que muchas veces pasamos por alto. Escoge unas preguntas (o todas) y contéstalas o utilízalas para platicar con otros acerca de este año a punto de concluir.
¿Hiciste algún descubrimiento este año?
Podría ser algo sencillo que trae felicidad a tu vida o que nunca pensaste te podría agradar. Es posible que hayas descubierto una afición por andar en bici, hornear pasteles o la electrónica.
¿Qué agradables sorpresas experimentaste en el 2018?
Quizás viviste la recuperación de una enfermedad propia o de algún familiar. O conociste un lugar que no habías imaginado sería tan agradable; recibiste la visita de una persona querida y disfrutaste de su compañía.
¿Qué hábito o actitud integraste a tu vida en este año?
A lo mejor tiene que ver con llegar a tiempo al trabajo todos los días, leer más y chatear menos, ser más paciente con los niños y los adultos mayores, aceptar las cosas que no puedes cambiar y hacer algo para modificar las que sí está en tus manos hacerlo.
¿Qué te atreviste a enfrentar en los últimos doce meses?
Por ejemplo, hablar de un tema espinoso con una familiar o amigo; iniciar tu propio negocio; animarte a estudiar eso que siempre habías deseado aprender; dejar la relación con una persona difícil; comprometerte más con tu familia; pedir ayuda si normalmente te cuesta hacerlo.
¿Cuál de tus relaciones mejoró o se volvió más cercana?
He aquí algunas ideas: la relación con una compañera de trabajo se hizo más estrecha y cálida; una persona poco conocida por ti resultó ser un gran apoyo en un momento difícil; tu pareja decidió asistir a un grupo de alcohólicos anónimos para tratar su dependencia al alcohol y esto ha mejorado su relación.
¿A quién te gustaría agradecer por estar o entrar en tu vida?
A ese primo con quien no habías tenido mucho contacto, que ha enriquecido la convivencia familiar; a la jefa que dejó el puesto este año y de quien tanto aprendiste; al profesor que ha sido un buen modelo a seguir.
¿Qué te hace feliz haber dejado atrás este año?
Tu respuesta podría estar relacionada con dejar la tendencia a victimizarte, abandonar una relación tormentosa, cambiar de un trabajo con jefes abusivos, resolver un dolor o resentimiento que habías cargado por mucho tiempo; perdonar a quien te hizo daño.
¿A qué meta llegaste este año?
Quizás lograste terminar tus estudios o avanzar un año más hacia esa meta; aprendiste a decir “no” para poner límites en tus relaciones o con tus hijos; adquiriste una mayor destreza con la computadora; lograste reunir a la familia para disfrutar una celebración.
¿Cómo cambió la percepción de ti mism@ en el 2018?
Por ejemplo, te diste cuenta de que eres emocionalmente más fuerte de lo que pensabas; descubriste que han cambiado tus gustos y ahora eres más sociable; reconoces tu tendencia a perder los estribos y decides hacer algo al respecto.