“Creo que mi marido me pone los cuernos, estas son las pistas que tengo”

PREGUNTA: Me contactó un tipo en una plataforma. Dijo que vivía en Los Ángeles, me enamoró y dijo que iba a venir a verme, que me mandaría un boleto de avión. Total, entre una cosa y otra, me bajó seis meses mis quincenas y el ahorro que tenía. Cuando le pedí parte de mi dinero, desapareció. Me siento engañada, idiota y desamparada. ¿Qué hago?

RESPUESTA: La soledad juega un papel esencial en esa necesidad de sentirte cuidada y querida. Respira profundo y cada vez que te sientas engañada acuérdate de los que de verdad te quieren; espero que no vuelvas a cometer el error de darle tu dinero a nadie más.

PREGUNTA: Sospecho que mi marido está teniendo una relación. Se metió al gym y algo comenzó a cambiar. Yo he empezado a analizarlo y ya se porta diferente conmigo, lo noto ausente, distante, raro, me esquiva, ya no quiere tener relaciones sexuales conmigo y no puedo estar tranquila. ¿Cómo enfrentar esta situación?

RESPUESTA: Tus sospechas pueden ser o no ciertas. Lo que es primordial es analizar por qué percibes que tú pasaste a un segundo término. Puede que sea otra razón lo que lo tenga ausente. Antes de salir con una escena de celos, analiza qué quieres de tu relación y, entonces, dile lo que esperas tú de la relación.

PREGUNTA: Mi novio odia hacerlo con condón. Lo toma a mal cuando le pido que se lo ponga y me hace sentir que le estoy llamando infiel, cochino y sucio. Estoy en mi derecho de pedirle que se lo ponga para protegerme, pero dice que siente que le doy asco, que él con condón no va a coger. Es imposible llegar a un acuerdo. ¿No somos compatibles?

RESPUESTA: Estás en tu derecho de pedir que se ponga condón tu pareja. También pueden hacerse exámenes de para saber si cualquiera de los dos trae alguna infección de relaciones pasadas. El secreto está en que su cuerpo y tu cuerpo se hacen uno.

PREGUNTA: Mi mujer odia la pornografía, siempre me sale con el cuento de que es gente que necesita llegar a mostrarse para sobrevivir. No se da cuenta que hay gente profesional en ese terreno y que es una forma digna de ganarse la vida, la cosa es que, en lugar de calentarnos como cualquier pareja, nos enfrentamos uno al otro. Sólo puedo ver porno escondido. Parece mi mamá y yo su hijo. ¿Es el colmo, no crees?

RESPUESTA: Es más común de lo que imaginas que las parejas no compartan los mismos gustos. La pornografía es un tema de desacuerdo en muchos hogares. Más que imponer una forma de sexualidad, vale la pena encontrar las maneras que les funcionan para disfrutar juntos, el gran reto de cada pareja. La masturbación individual, con o sin porno, no está a discusión. Cada uno merece su espacio.