Actores XXX no brillan en la Expo SexMex, pero se agradece tremendas herramientas de trabajo

Por "El Sex Machín"

Queridos saltamontes de la lujuria, segundo día de la Expo SexMex y aún me siento como en película hollywoodesca luego de una etapa apocalíptica, y es que el evento oficialmente es su primera versión de la etapa post-pandemia.

El primer día apenas fue para arrancar motores, pero esta segunda presentación ya la acalorada concurrencia (y no lo digo porque estuvieran ya encuerándose por las ganas de entrar, sino porque el rey sol estaba en su plenitud) estaba como chamaco a punto de entrar en juguetería, estaban que pelaban tamaños ‘ojotes’ por ver a sus diosas que seguro, de forma virtual los acompañaron en esas frías noches de soledad.

Aunque también está la otra parte del público que, sin reconocerlo, llegaron a rendir tributo a los actores XXX, que si bien no son el foco central de la expo, sí dan batalla no solo en el evento, también en las grabaciones que hace a lo largo del año la productora.

Dice el primo de un amigo, hermano de un pariente, se admira por la ‘herramienta de trabajo’ que suelen mostrar en las grabaciones, y donde los más envidiosos dirán ‘pues no te dieron galanura, pero en la creación te amontonaron más barro ahí abajo’.

Fue así que tuve la oportunidad de platicar con Iran Lux y Pablito Metralla, que la neta pasan bien desapercibidos entre la horda de soldados que se aguantan la pena de pedir ‘chichis pa’ la banda’, mientras las estrellas masculinas solo se divierten con las ocurrencias de mis súbditos.

Ellos, los actores mexicanos saben que las chicas son las que se llevan el show, la expo y mientras ellos auxilian en otras labores, solo esperan el llamado para ir al show principal, donde al estilo hombre increíble, sacan la bestia que llevan dentro y se convierten radicalmente en los ‘másters’ de las miradas lujuriosas que están ahí con la boca abierta y las sonrisas nerviosas.

Y aunque a muchos no les guste, los vean con cuerpos de ‘Peter la Anguila’, sin una gota de esteroides, yo me atrevo a decir que son los ‘vatos locos forever’, pues hacen de su trabajo una diversión, con miras a que los puedan ver en Gringolandia.