Helena Danae anda de antojo, quiere una novia y así la ha soñado

Hola, mis amores, ¡feliz miércoles! Que su semana sea perfecta y si hay algo que les afecta, lo puedan cambiar para mejorar. 

Yo quiero hoy decirles que últimamente he tenido ganas de tener una novia... Estas noches he estado soñando demasiado con estar con otra mujer, más allá del trabajo. 

Sueño que nos acariciamos por las noches, que nuestras lenguas juegan entre ellas y después, su lengua baja despacio pasando por mis tetas, mi abdomen y mi ombligo, hasta llegar a mi almendrita y darme el mejor sexo oral de mi vida. 

Lee también: Mujer alérgica a la leche de hombre revela la agonía que vive cada que hace el delicioso

Creo fielmente que, como mujer, entendemos mejor cómo nos gusta que nos lo hagan. Entendemos lo que siente la otra persona de una forma mas física. Es decir, entiendo la anatomía de su cuerpo, conozco los puntos más sensibles y, además, le pregunto qué es lo que a ella le gusta, con toda esa información puedo hacer maravillas. 

Sé que con la comunicación puedes decirle a tu pareja lo que te gusta, pero al final no tienen lo mismo entre las piernas, por lo cual es más complicado entender lo que se sentirá. Es por eso que sueño cómo podría ella chuparme y hacerme venir, incluso en un ‘69’. 

Amaría estar entre sus piernas, acariciando sus nalgas y comiéndome todo ese elíxir que dejaría escurrir, mientras ella hace lo propio conmigo. 

Aunque, honestamente, no he incluido ningún tipo de sentimientos en mi deseo. Sólo quisiera sentir su piel contra la mía, respirar ese aroma delicioso que el cuerpo de una mujer emana.

Sé que necesitaría tener un tipo de conexión romántica, que cuando lo hagamos pongamos todo nuestro espíritu en ese sexo casual y después, cada una irse por su lado, para poder hablar entre nosotras como si solo fuéramos amigas. 

Al final eso seríamos, amigas. Creo que ya a cierta edad entiendes que el sexo es placer para ambas partes y no necesitas estar enamorada para disfrutarlo. 

Por supuesto que deberíamos hablarlo claro y esa persona debería ser alguien con una mentalidad igual o muy parecida a la mía, para no caer en ningún tipo de disgusto o sorpresa. 

Aunque no sé cómo empezar a buscarla, entiendo que estando en mi casa no va a llegar sola. He tenido algunas ideas, pero aún me da miedo ponerlas en marcha. El rechazo siempre es algo que nos aterra, pero quien no juega, no gana. 

Así que de ahora en adelante me propondré encontrar a esa bella princesa para hacer realidad mis sueños más eróticos y húmedos.

No sé si lo haría de tal modo que, incluso, pudiera grabarlo y compartirlo con ustedes o si solo lo dejaré para mí. 

Aún hay muchas cosas que necesito poner en orden para animarme a llegar con alguna mujer que me guste y plantearle la idea. ¿Alguna voluntaria? 

Les envío demasiado amor y espero con ansias que me tengan en sus manos la próxima semana.