Sí, igual que tú, también estoy harto de ser cliente frecuente de los que chingan a cada rato. Ya me cansé de ser invisible para las cosas que valen la pena.
En definitiva las mujeres que pierden la calma se vuelven huracán de escalas descomunales, alimentados por los vientos encontrados del amor y la ansiedad.
"Cuando naces con la suerte al revés, no hay poder humano ni golpe del destino o ayuda divina que te eche una mano. Cuando naces entre paredes sombrías, escasean los motivos para apreciar el alba"
Mientras los hombres vemos el futbol o bebemos cerveza, las mujeres están decidiendo si aceptarnos, descartarnos, cambiarnos, matarnos o simplemente abandonarnos.