fiscalía descarta tortura, dicen que fauna la devoró
Claman justicia para Jessica, tras feminicidio en Huixquilucan
Familiares y amigos dan el ultimo adiós a la doctora de Otzolotepec que fue hallada decapitada en Huixqui
Foto: Archivo El Gráfico
Michelle García
Sonaron las 12 campanadas de la iglesia de la comunidad de Santa María Tetitlá, en Otzolotpec, y todavía algunos de sus habitantes se preguntaban quién iba dentro del féretro. Jamás se imaginaron que la doctora Jessica Sevilla Pedraza había fallecido.
En los pasillos de la iglesia y durante la misa, aún no podían creer que la joven madre, de 29 años, hubiera sido víctima de un feminicidio.
Sorprendidos, se preguntaban quién habría sido capaz de quitarle la vida a esta mujer, que hasta hace menos de un mes había abierto un consultorio en favor de los habitantes de esta zona.
Música y flores. Eran las 11 de la mañana y familiares, amigos y la comunidad médica de Xonacatlán arribaron las calles del centro de esta comunidad. Poco más de 25 coronas de flores con dedicatorias de amigos, colegas médicos e instituciones de salud llenaron las calles.
Más de 500 personas acompañaron a darle el último adiós a la familia. A la salida del cortejo, un mariachi comenzó a tocar "Amor Eterno".
La mayoría de los hombres querían llevar en hombros el ataúd de Jessica hasta el panteón municipal Villa Cuauhtémoc.
Al frente, varios hombres se ofrecieron a cargar las coronas. Su madre, padre y hermanos caminaban hasta le panteón con una foto de Jessica con un moño blanco. A su paso tronaban cohetes y aventaban flores blancas hacia el ataúd.
Impotencia. Cuando el contingente llegó a las puertas del panteón, los dolientes, enfurecidos y con impotencia, gritaban: “Justicia por Jessica”, exigiendo al Gobierno del Estado de México y a la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, que esclarezca el homicidio y dé con él o los presuntos responsables.
“Yo era padre de cinco hijas, ahora sólo me quedan cuatro. ¿Con cuantas me van a dejar? Lo único que pido es que se pongan a trabajar que vean lo que está pasando y que no haya más casos así", dijo Abel Sevilla, padre de Jessica.
Por su parte, Juana Pedraza, madre de la víctima no quiso dar parte de lo asentado en la carpeta de investigación, dado que no quieren comprometer los posibles resultados que esta pudiera dar. Aunque, al igual que el resto de la familia, exigió a las autoridades poner fin a su angustia y entregar a quienes le quitaron la vida a su hija.
"Queremos hacer un llamado a la comunidad, a la Procuraduría, al presidente (Enrique) Peña Nieto y (al gobernador del Edomex) Eruviel Ávila, no queremos 20 Jessicas más, ni una más, es lo único que podemos pedir”, clamó la mujer.
QUE NO HUBO SAÑA. Luego del hallazgo en el que fue encontrado el cuerpo de Jessica, en las inmediaciones de la colonia El Hielo, municipio de Huixquilucan, la Fiscalía mexiquense concluyó que la causa de muerte derivó de un impacto de bala.
Precisaron que las heridas e incluso el desprendimiento de su cabeza derivó de la fauna del lugar y no a una posible decapitación.
Tras las diligencias realizadas, se estableció que la víctima fue arrojada en este sitio, luego de haber sido asesinada por dicho impacto de arma de fuego.
Hasta el momento hay una línea de investigación sólida y un presunto sospechoso, por lo que la Fiscalía de Feminicidios investiga el caso.
Los peritos e investigadores de la FGJEM, después de analizar las heridas que tenía el cadáver — sumado a las condiciones a las que fue encontrado— llevaron a los especialistas a analizar la fauna del lugar, misma que es la principal causa de las condiciones en que Jessica fue hallada.