Festejo maratónico para San Francisco de Asís, en Tlalcilalcalpan

Por más de 36 horas, los pobladores de San Francisco Tlalcilalcalpan anduvieron de fiesta durante su tradicional “Paseo de los Locos" que desde hace más de cien años celebran en honor al patrono de la comunidad.

La imagen principal de San Francisco de Asís desde lo más alto de un carro alegórico, encabezó el recorrido ambientado con música de banda, que sólo era opacada por la gran cantidad de cohetes que en el cielo tronaban.

Durante el sábado, domingo y lunes, muchos olvidaron el trabajo y la escuela. Las preocupaciones se esfumaron entre el baile, las risas, los aplausos, las fotografías y la diversión.

Los ahorros de todo el año se transformaron en costosos trajes de seres extraordinarios, salidos de la imaginación de quienes los portaban sólo para ganarse la admiración de los miles de visitantes que agradecieron un fin de semana fuera de lo común.

"Me salió como ocho mil meses mi vestuario, me lo hicieron, pero yo lo diseñé. Vale la pena, con tal de preservar esta bonita costumbre", platicó Carlos Gutiérrez, participante.

“Es la tradición que tenemos desde hace muchísimos años y nuestros hijos que vienen atrás son los que hacen más fuerte esta fiesta”, relató Ricardo Fabela, vecino de la comunidad.

Este año, el payaso "Eso" escapó de la pantalla grande para aterrorizar a algunos visitantes, que olvidaban el susto al ver pasar personajes más nobles inspirados en diferentes programas de televisión.

Preocupación. La venta y el consumo de alcohol y de espumas indignó a algunos, quienes recordaron con nostalgia los inicios del Paseo de los Pregoneros, como anteriormente se le conocía.

“En general, supongo que debe ser una devoción a nuestro santo patrón que es San Francisco de Asís, lamentablemente se ha distorsionado mucho y me entristece a la vez al ver mucho joven que viene a tomar y nos falta al respeto”, señaló Laura Hernández, una de las participantes.

El cansancio solo disminuyó la intensidad del festejo, pero no venció a los participantes que bailaron entre el intenso sol y el frío de la noche.

Más de 60 carros alegóricos y decenas de comparsas, mostraron un año más por qué "El Paseo de Los Locos" es uno de los mejores de la región.

(Fotos: Alma Ríos y Gerardo Mendoza, El Gráfico)