POR FALLA EN CUTZAMALA
Damnificados piden no los dejen olvidados
Pobladores de Autopan siguen con limpieza y recuento de daños; esperan que las autoridades los indemnicen
Damnificados piden no los dejen olvidados (Foto: El Gráfico)
A más de 48 horas de que el agua que lleva la Línea 1 del Sistema Cutzamala arrasara con 25 casas en San Carlos y Jicaltepec Autopan, dejando cientos de damnificados, la situación no ha cambiado para ellos.
El lodo se ha secado para dar paso a un escenario en el que el polvo es tan abundante como la desesperación de los lugareños. Sus ropas están secas y ya no hay agua en sus casas, pero sus pertenencias siguen inservibles, el fruto de su trabajo no les da ya ninguna satisfacción.
Los niños juegan en la tierra, no pudieron ir a clases, sus libretas, libros y uniformes eran un despojo. Mientras, las mujeres de la comunidad se dedicaban a la limpieza de lo poco que pudieron salvar, unos trastes y algunas prendas de ropa.
Al fondo, empleados del municipio limpiaban las calles, reforzaban las paredes de los canales que por ahí pasan. La vida de los vecinos de ambas comunidades estaba en pausa.
“Estábamos hablando que según sí nos van a ayudar con un poco de dinero, sí nos hace falta, ya nos dieron colchonetas. Dijeron que nos iban a reponer todo lo que perdimos, pero no nos han dado ni fecha, ni un vale, nada. Muchos perdieron sus cosechas de maíz, otros no tenemos en qué dormir, cocinar o guardar nuestra comida”, comentaron Felipe y Margartita, dueños del cuarto que se desplomó cuando falló el Cutzamala este domingo.
Espera. A pesar de que ya hubo un primer acercamiento por parte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y del ayuntamiento de Toluca, no se ha llegado a un acuerdo concreto. Esperan a que se terminen de cuantificar los daños, para el 25 de este mes puedan saber qué se le tiene que pagar a quién.
Cirilo, quien con un nudo en la garganta hacía un recuento de los daños está convencido de que si no le brindan ayuda o la indeminización necesaria a él y a su gente en los próximos días, podrían cerrar de nuevo el Libramiento Bicentenario, pues "no van a dejar que las cosas se queden así y se olviden de los daños que les dejaron".
Optimistas. En tanto, las autoridades auxiliares por su parte, eran más optimistas.
“Se firmó una minuta de trabajo, se van a arreglar las viviendas de los afectados y reparar los daños al 100 por ciento, pero hasta el 25 van a terminar de ver, hablamos con el arquitecto Rubén Díaz, de Conagua. La gente está preguntando para cuándo les liquidan, pero hay que cuantificar", comentaron los comisarios ejidales de la zona.
A unos metros de distancia de las casas, la zona cero. La maquinaria y trabajadores de Conagua no paran, continúan su labor contrarreloj para reparar los tubos, sin importar si hace o no calor, si llueve o si están cansados.
Ellos, agobiados, no van a parar de trabajar hasta que quede todo perfecto. Uno de los tubos está ovalado, así que tienen que adecuar los nuevos para que sellen perfectamente y evitar nuevas fracturas ahí.
Sin embargo, afirman que las manifestaciones de la gente damnificada, aunque totalmente justificadas, han retrasado la funcionabilidad del servicio al menos 12 horas.
El reloj avanza, no cede, y la presión que hay para la empresa, tampoco.
De acuerdo con Conagua, no es sólo la reparación del tubo lo que hay que esperar para que las 800 mil personas mexiquenses, que viven en los trece municipios afectados, tengan el servicio normal de agua potable en sus casas.
Pues una vez que quede lista la obra, serán 12 horas más para que el agua llegue a los puntos distribuidores del Estado de México y la Ciudad de México, y de ahí otras más para que llegue a los hogares y establecimientos que sufren el desabasto.
En tanto, el temor sigue, son varios los puntos del Cutzamala que necesitan atención. Hay zonas en las que la corrosión avanza más rápido que en otras, mientras que hay tubos que ya cumplieron su ciclo de vida, por lo que la Conagua está en constante monitoreo y esperan poder reparar todos los tramos antes de que se dé otra falla súbita.