Una rica taza de chocolate calientito es irresistible, como comer un trozo de este delicado alimento, que enciende el ánimo, calienta el cuerpo y al consumirlo con moderación, incluso ayuda a prevenir ciertos males, hasta la depresión.
Un trabajo del British Medical Journal (BMJ) indica que comer chocolate tiene una influencia saludable gracias a sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Brinda beneficios para bajar la presión arterial y mejorar la sensibilidad a la insulina.
Chocolate, bueno… bueno. El comer chocolate da alegría, placer, una fuente de energía y en la ASCHOCO (Asociación Nacional de Fabricantes de Chocolates, Dulces y Similares): “Estamos convencidos que es un alimento que brinda grandes beneficios a la salud y bienestar”, indica su directora general, Alicia Páramo Ortega.
Una de las razones es que produce placer porque el cacao y su derivado, el chocolate, contienen teobromina, alcaloide que posee efectos estimulantes en los sistemas de alerta en el cerebro.
La sustancia produce vasodilatación de venas y arterias, lo que incrementa el flujo sanguíneo y disminuye la presión arterial.
Mina de sabor y salud. Este alimento es fuente de grasas, proteínas, carbohidratos, vitaminas y minerales: sus ácidos grasos ejercen una función estimulante de endorfinas, que tienen que ver con las sensaciones de placer y estado de ánimo.
Además, la feniletilamina que contiene este alimento genera una sensación especial en el cerebro, muy parecida a la que se crea durante el enamoramiento y es la responsable de la euforia de esos días.