Las tentaciones de la dieta mexicana abundan, la comida es sabor puro, lo mismo que bebidas y postres. La sucesión de platos no acaba, va del chile en nogada hasta la rosca de reyes. La oferta es tan deliciosa que nadie se sensibiliza sobre cómo lo resiente la piel.
La cuestión es que las calorías extras tienen efecto en la piel, aminora su calidad, produce más grasa, genera acné, que estimula las 900 glándulas sebáceas de áreas determinadas del rostro o deshidrata, la que acelera la aparición de líneas de expresión.
Comer para lucir bella. Para expertos no hay un estudio que confirme que alimentos como chocolate o chorizo por mencionar algunos, aumenten ciertos padecimientos, pero mantener una dieta desequilibrada sí afecta.
Recomiendan “cuidar tu rostro todo el año”.
Limpia tu rostro todos los días. La alimentación tiene un papel importante en la salud de la piel. Hay otros factores contaminantes como humo y polvo que dañan y provocan envejecimiento prematuro en la piel. Sugieren usar un dermo-limpiador que limpie y controle el exceso de grasa en la piel, además de revitalizar el rostro.
Los sueros faciales previenen el envejecimiento de tu rostro.
Dormir menos de 8 horas hace que los poros se dilaten, avejentándote. Ante lo impostergable, busca un suero facial que aporte firmeza a tu piel con un “efecto tensor” y que te matifique.
Masajea tus mejillas y papada. El tema termogénico es sorprendente, aplica una crema de manera rutinaria, con un ligero masaje de arriba hacia abajo, para que su efecto frío - calor contribuya a definir las mejillas y reafirmar la zona de la papada.