El deseo de las mujeres por “desarrollarse profesionalmente y lograr estabilidad económica ha reemplazado el proyecto de convertirse en madres”, dice el biólogo de la reproducción Alberto Kably, fundador del Centro Mexicano de Fertilidad.
Ante el cambio, la mayoría de las mujeres que acuden al centro con el deseo de ser tratadas por infertilidad, rebasa la edad biológica óptima: va de 25 a 35 años, periodo en el cual la gestación puede realizarse con menor complejidad y mayor seguridad de llevar el embarazo a término.
Problemas de la vida. La fertilidad de la mexicana no cambia con la edad ni con los hábitos sociales: desórdenes alimenticios, tabaquismo o adicciones. Pero, las tendencias de peso ideal sacrificando la alimentación, exposición a estrés y las condiciones de un nuevo estilo de vida, afectan la salud reproductiva femenina, señala el doctor Kably.
Comentó que después de los 35 años el organismo cambia y las probabilidades de tener un embarazo saludable se reducen pues conllevan riesgos como: presión alta en la gestación, también llamada preclamsia, aborto, nacimiento prematuro, diabetes gestacional o alteraciones genéticas o cromosómicas. La infertilidad es un problema compartido que afecta a hombres y mujeres, pero se da mayor atención en factores de las mujeres.
Detalles de bien. Alberto Kably aseguró que la hiperestimulación ovárica controlada con medicamentos, inseminación artificial, fertilización In Vitro y transferencia de embriones (FIVTE), son métodos de reproducción asistida confiables para un embarazo saludable. Kably explica que el avance tecnológico en los procedimientos de reproducción asistida, permite a las mujeres decidir el momento oportuno.