Ejecutan a hombre cuando salió a comprar el desayuno

Hace casi un año, Armando Moisés conoció el luto. Tras el homicidio de uno de sus hijos, el hombre fue amenazado de muerte. Ayer, un motociclista y dos balas le hicieron cumplir la sentencia.

Las calles de la colonia Vallejo son el lugar donde los Mejía han vivido los homicidios de dos integrantes de la familia. 

Uno murió en noviembre pasado, a unas calles del domicilio donde vivía. Él era hijo de Armando Moisés Mejía Torres, el hombre que la mañana de ayer fue ejecutado al salir a comprar el desayuno.

Eran casi las nueve de la mañana. A esas horas los habitantes de la calle Pedro Luis Ogazón escucharon dos detonaciones. El sonido alertó a los vecinos, pero también alarmó a la familia Mejía Torres. 

Y es que minutos antes de que se escucharan los disparos Armando Moisés había salido de la casa de su madre.

Aún no abordaba la bicicleta en la que se dirigiría a un puesto callejero cuando dos motociclistas se le acercaron

dos disparos. Sin descender de la moto, el copiloto desenfundó un arma y disparó. El tiro en la pierna no fue suficiente para el homicida. Él pidió al conductor que se acercara para dar el segundo disparo. Una bala a la cabeza mató a la víctima.

Dicen quienes vieron el homicidio que el ataque duró unos segundos. El tiempo fue suficiente para que los familiares de Armando Moisés salieran del domicilio para ver escapar a los atacantes.

Mientras los motociclistas escapaban por la calle Clave, los testigos pedían ayuda de los paramédicos. Pero a su llegada el hombre había muerto. Tal vez, dicen los testigos, los homicidas confundieron a Armando Moisés con otro de sus hijos. Y es que padre e hijo llevaban el mismo nombre.

La víctima era hojalatero en un taller en la calle Bethoveen, en la colonia Peralvillo.