Paracaidista se despide de su esposa antes de morir

Vitantonio Capotorto, un experimentado paracaidista, saltó al vacío hacia una muerte segura desde más de 4 mil metros de altura, tras grabar y enviar un último mensaje en video a su esposa, Costanza Litellini, en el que le comunicó que se dirigiría a “un lugar maravilloso”.

Inmediatamente después de recibir el documento gráfico en el que el saltador reconoció que no iba a accionar su paracaídas, esa mujer se dirigió al lugar desde donde partiría su esposo para impedir que llevara a cabo su plan.

Así, Litellini solicitó a una empleada del centro de paracaidismo que impidiera que Capotorto saltara, pero cuando esa persona avisó por radio a la aeronave, le comunicaron que era demasiado tarde.

El cuerpo del suicida, que tenía 27 años y había realizado cerca de 600 saltos, apareció boca abajo en un campo próximo al centro de paracaidismo del que partió, ubicado en Deland, Florida, Estados Unidos.

Un empleado del lugar aseguró a la Policía que Capotorto “se comportó de manera normal antes de subir a la aeronave”.