Pensar en exceso puede ser malo
Los estudios recientes de un grupo de científicos develaron que prestar demasiada atención en alguna tarea puede complicar e incluso impedir su realización
Los estudios recientes de un grupo de científicos develaron que prestar demasiada atención en alguna tarea puede complicar e incluso impedir su realización.
De acuerdo con los especialistas, existen dos tipos de memoria: la implícita y la explícita; ambas forman parte de la memoria a largo plazo, pero la primera no requiere pensamientos conscientes y la otra sí.
Para comprobarlo, mostraron a un grupo de personas imágenes caleidoscópicas por periodos de un minuto, y luego tuvieron un descanso antes de contestar otros test con imágenes distintas.
“Después de obtener sus respuestas les preguntamos que si recordaban muchos detalles, si tenían una impresión vaga o si estaban adivinando. Los participantes que aceptaron estar adivinando fueron los que obtuvieron mejores calificaciones”, señalaron los investigadores.
De acuerdo con "Pijama Surf" la memoria implícita es más confiable en algunas situaciones como recordar una imagen o cómo andar en bicicleta; mientas que para recordar un texto o una línea de tiempo es mejor la memoria explícita.