El gen de la gordura sí existe y ya lo tienen contra la pared

Durante años se ha pensado que bajar de peso depende de comer bien y hacer ejercicio, culpa de la comida chatarra y la pereza, pero resulta que los genes también tienen algo que decir en este asunto.

Un grupo de científicos descubrió que existe un gen llamado SMIM1 que, cuando se rebela, provoca un aumento de peso como si no hubiera un mañana.

Los investigadores vieron que las chicas con este gen mutante cargan con 4.6 kilos extra (como si llevaran un perrito rechoncho todo el tiempo), y los chicos con 2.4 kilos (equivalente a una piña colada gigante).

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Pero que no se desanime nadie, esto solo afecta a 1 de cada 5,000 personas. Es como ganar la lotería, pero de kilos y centímetros.

“Las causas de la obesidad son muy complejas y, en la mayoría de los casos, su origen está en una combinación de muchos factores. En este estudio, sin embargo, encontramos un claro desencadenante genético para la obesidad", dijo a CNN el autor principal del estudio, el Dr. Mattia Frontini, miembro senior de la Fundación Británica del Corazón y profesor asociado de biología celular en la Universidad de Exeter en el Reino Unido.

Lo positivo es que los médicos están muy entusiasmados con este hallazgo. Es como si hubieran encontrado el tesoro del pirata en el mapa genético: a partir de su identificación se podrá generar terapias que ayuden a bajar de peso y hagan ganar mucho dinero a las farmacéuticas.

Este gen mutante hace que la tiroides se haga tonta, pero con medicamentos económicos y seguros, podrían despertarla y ponerla a trabajar.

Si has estado luchando contra la báscula y nada funciona, tal vez no sea culpa de tus tacos favoritos. Podría ser que tienen este gen engordador en su ADN.