Estas son las oscuras secuelas sociales que dejó la pandemia del Covid

Durante la pandemia el mundo vivió momentos de aislamiento y hoy aún se sienten los efectos de ese periodo oscuro en la sociedad que dejaron una nueva pandemia de soledad y desconexión personal, asegura la coach de vida Daya Rebolledo.

“Como nos vimos forzados a aislarnos y conectarnos por tantos tiempo, una de las cosas que más nos ha costado es reconectar con la gente, por eso es necesaria la interconección interpersonal con las personas a nuestro alrededor. Es importante en la autoconciencia, conocernos a nosotros mismos, a nuestros pensamientos, a  nuestras emociones y desarrollar esa resiliencia para poder enfrentar todo con fuerza determinación y confianza necesaria”, explicó la especialista sobre desarrollo humano. 

Pero no es la soledad “de estar contigo para tomar tiempo y reflexionar, es esa manera de sentirte aislado, sentirte sólo y se debe tener esa reconexión con la demás gente y muchas veces hasta la gente se siente incómoda en la calle porque se nos olvidaron las habilidades de socializar”, explicó la autora del libro Frágil a Ágil.

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Sugirió que para lograr socializar de nuevo “es tener la autoconciencia, entender tus valores de qué es importante para ti, para empezar a atraer tanto personas como situaciones que estén en sintonía, ponérselo como meta, como un reto para empezar a tener actividad y todos los días que tu meta sea conocer personas; todos los días o una a la semana y proponerte un plan de acción para lograr hacerlo”.       

Agregó que los seres humanos “podemos etiquetar 3 emociones; la alegría, la tristeza y la ira” que es algo que aborda en su libro que da una “herramienta práctica para ver cómo eres emocionalmente. Lo primero es identificar qué piensas, qué sucede a tu alrededor, segundo darle un nombre a tu emoción y ponerle un nombre a tu emoción, luego la aceptación y no ponerla a un lado y es importante sentir y reflexionar porque tu emoción te va a decir que valoras y finalmente cómo seguir adelante para alcanzar tus objetivos”. 

De acuerdo con Daya, ser una persona frágil está “ligado a la sensación de vulnerabilidad emocional, física o mental y es reforzada por miedos o inseguridades que todos adoptamos a lo largo de la vida, en cambio la agilidad es un concepto que nos permite comprender y accionar de manera rápida y certera ante la adversidad”.

Para Daya hay ocho principios  que te permitirán desarrollar una mentalidad ágil que “te ayudarán a fortalecer tu confianza y resiliencia, alcanzar tus metas más ambiciosas, tomar decisiones de manera rápida y efectiva, así como adaptarte fácilmente a los cambios con una actitud flexible para encontrar soluciones innovadoras aplicables en todas las áreas de tu vida, creando un efecto de tranquilidad y satisfacción contigo y tu entorno”.

Actualmente vivimos en un mundo que define como Mundo VICA, “este mundo se rige entre lo Volátil, que se refiere a la velocidad de los cambios, lo Incierto que nos habla de la dificultad para predecir el futuro, lo Complejo en donde fluyen los problemas en múltiples dimensiones y lo Ambiguo, es decir que hay una infinidad de interpretaciones del mundo. Este conjunto de limitantes se puede vencer fácilmente cuando adoptamos una mentalidad ágil”.