¡Atención! 5 cuidados sencillos para frenar el envejecimiento a partir de los 50 años

Se acerca el quinto piso, y entre los vicios y los descuidos acumulados en los años de bonanza, el cuerpo definitivamente ya no es el mismo.

La quinta década, desde la perspectiva más optimista, es el inicio de lo mejor. Es el momento de cosechar lo que trabajaste en tu primera juventud, tienes energía y experiencia en todos los ámbitos.

Y también es el mejor punto de partida para prepararte hacia el tercer bloque de la vida, consciente y dispuesto a cuidar de lo que realmente tu importa, por ejemplo, tu salud.

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En un estudio de la Asociación de Estadounidenses en el Retiro se enumeran cinco cuidados indispensables para combatir el envejecimiento que se deben tomar en cuenta especialmente cuando se cumplen 50 años.

La primera es la alimentación. En esta etapa de la vida, el metabolismo puede empezar a tener problemas en su desempeño. Poner de tu parte para cuidar cuánto, qué y cómo comes es muy importante para ayudar a tu organismo a no aumentar de peso.

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Ojo: alimentos que tal vez antes no te engordaban a partir de este momento puedan dejar una huella más clara en tu cuerpo.

En segundo y tercer puesto está el cuidado del tabaco y el alcohol. El reporte de la organización civil estadounidense recuerda que siempre es un buen momento para dejar de lado el consumo de estas dos drogas socialmente bien vistas. 

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Datos de la Organización Mundial de la Salud muestran que el tabaco es la primera causa evitable de enfermedad, invalidez y muerte prematura en el mundo. Los cigarrillos matan a 8 millones de personas cada año por la bronquitis crónica, el cáncer de pulmón, la hipertensión, las úlceras gastrointestinales o los accidentes cerebrovasculares con los que se le relacionan.

El efecto del alcohol, por su parte, se da desde la primera copa que tomamos, al vulnerar el sistema inmune, acelerando la aparición de la diabetes y provocando  envejecimiento prematuro del tejido hepático.

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El estrés es la cuarta condición que los expertos piden cuidar cuando se alcanza “el tostón”. La Asociación de Psicología Americana describe al estrés como una sensación de agobio, preocupación y agotamiento, capaz de producir problemas de salud tanto física como psicológica, como ansiedad, insomnio, dolor muscular, alta presión y debilitamiento del sistema inmunitario.

Incluso puede contribuir al desarrollo de enfermedades graves, incluidas las cardiacas, la depresión y la obesidad. Darte tiempo para realizar tus pendientes, atender a tu familia, cuidar de ti contribuirán a evitar la acumulación de problemas y la llegada del asfixiante estrés.

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El último punto que se debe cuidar a partir de los 50 es la soledad no deseada. 

“Cuando vivimos aislados, sin integrarnos socialmente, la calidad de vida se deteriora y las enfermedades atacan. El proceso degenerativo se incrementa si no tengo vínculos sociales. La soledad es un tema de salud pública que abona a la depresión y a los trastornos de ansiedad, así como a intentos suicidas”, ha descrito la doctora Ana Lilia Villafuerte, académica del departamento de Psicología de la Universidad Iberoamericana.

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