RECIBE NOMINACIÓN COMO CANDIDATO PRESIDENCIAL
Tras violento atentado, Donald Trump ya es “el bueno” del Partido Republicano
James David Vance, senador de Ohio, será su compañero de fórmula como aspirante a la vicepresidencia.
Foto: AP
Milwaukee.– Los delegados del Partido Republicano, concentrados desde ayer y hasta el jueves en Milwaukee para su Convención Nacional, formalizaron a Donald Trump y J.D. Vance como sus candidatos a la presidencia y vicepresidencia para que EU recupere un liderazgo que creen perdido.
Todavía consternados por el intento de asesinato contra Trump en un mitin el sábado, los representantes del partido en los diferentes estados se reunieron para confirmar por unanimidad la candidatura del magnate neoyorquino y de su compañero de fórmula, cuyo nombre fue revelado tras varias semanas de incógnita.
Se trata de James David Vance, el senador de Ohio con el que busca desarmar el último muro de contención de una avalancha electoral conservadora en noviembre: los estados del Medio Oeste y los votantes de clase media trabajadora.
Vance hizo su entrada triunfal a la sede de la Convención de la mano de su esposa Usha Chilukuri Vance, tras el sí unánime de los delegados.
Poco antes de la confirmación de Vance, Trump había dejado atada su propia nominación con el voto favorable de 2 mil 387 delegados, casi el doble de los mil 215 que necesitaba para formalizar este proceso.
Por la noche, de manera inesperada, entre aplausos, ovaciones y público en pie, el Partido Republicano recibió con todos los honores a Donald Trump, quien se presentó con la oreja vendada. Hasta el cierre de esta edición, el republicano no se había dirigido a sus partidarios.
Ayer mismo, Trump logró una victoria legal con la anulación del caso abierto contra él por mala gestión de documentos clasificados tras abandonar la Casa Blanca en enero de 2021. En su argumentación, la juez Aileen Cannon consideró ilegal el nombramiento del fiscal especial Jack Smith, que investiga el caso.
Sin pronunciarse sobre el fondo del asunto, la jueza dijo que el nombramiento y la financiación del fiscal especial violaban las secciones de la Constitución que rigen los nombramientos y los gastos.
Al reaccionar a este fallo, Trump pidió anular los demás juicios en su contra, que calificó de “ataques políticos. Debería ser sólo el primer paso, seguido rápidamente por el rechazo de todas las cacerías de brujas”, aseveró.