Uttarakhand .– En algún lugar entre las cimas nevadas del Himalaya indio yacen cientos de esqueletos, pero nadie tiene idea de dónde provienen los escalofriantes restos humanos. El lago Roopkund, fronterizo con Nepal, sigue siendo un misterio para los investigadores.

Las escenas macabras sólo ocurren durante un mes al año, cuando las aguas heladas del lago se derriten lo suficiente para poder echar un vistazo.

La morbosa imagen es casi sacada de una sangrienta cinta de Hollywood: varios cadáveres reunidos bajo la superficie de un lago glacial.

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Los investigadores estiman que hay alrededor de 500 restos humanos allí y especulan sobre qué los dejó en esta parte gélida e inhabitable. 

Lo que hace que el misterio en torno a este lago del Himalaya sea aún más escalofriante son sus duras condiciones.

HIPOTÉSIS

Una teoría popular es que las escenas espeluznantes, vistas por primera vez por un guardabosques británico en 1942, provienen de una especie de calamidad durante una peregrinación. 

Como hogar de la religión más antigua del mundo, no sorprende que los devotos viajen hasta la nación de mayoría hindú para rendir culto.

Foto: (THE SUN)

Pero es más probable que los restos procedan de peregrinos, ya que el impresionante lago forma parte de la ruta de Nanda Devi Raj Jat, recorrido por los seguidores de la religión politeísta.

Otras teorías que han circulado incluyen la idea de que los muertos eran lugareños que regresaban de la guerra. Pero los científicos no están convencidos de ello, después tras analizar el ADN de algunos esqueletos.

El estudio descubrió que la mayoría de ellos murieron hace mil años, pero no necesariamente al mismo tiempo. Sorprendentemente, detectaron que algunas de las personas podrían haber muerto durante el siglo XIX.

Quizás aún más extraño es que se descubrió que la gran mayoría de su ADN provenía del Mediterráneo, a miles de kilómetros de India.

La discrepancia en el tiempo indica que puede que no haya sido un desastre a gran escala, sino una serie de muertes misteriosas escalonadas a lo largo de los siglos.

EL DATO

La dificultad del viaje de miles de kilómetros y hasta cinco horas de recorrido a pie sugiere a los científicos que junto al lago podría haber todavía 400 cuerpos sin descubrir.