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En los adultos también puede aparecer en la zona genital. En la mayoría de los casos se supera por sí solo, sin tratamiento, generalmente en un plazo de 6 a 12 meses.
Una persona infectada por mpox generalmente tendrá síntomas similares a los de la gripe con inflamación de ganglios, el antecedente que da pie a manchas en la piel que se convierten en vesículas llenas de líquido que puede picar o doler.
Según la Organización Mundial de la Salud, a medida que la erupción se cura, las lesiones se secan y se cubren de costras que acaban por caerse.
Puede haber pocas lesiones cutáneas o cientos de ellas, y pueden surgir en cualquier parte del cuerpo, incluidas especialmente las palmas de las manos y plantas de los pies, cara, boca y garganta; ingles y genitales, y el ano.
Algunos casos más graves también presentan hinchazón dolorosa del recto o dolor y dificultad para orinar.
Estos síntomas pueden durar entre dos a cuatro semanas y desaparecen por sí solos, sin necesidad de un tratamiento. Se pueden usar medicamentos para aliviar síntomas como el dolor y la fiebre. Pero lo más importante es no tocar ni rascar las lesiones, dejar que se sequen o cubrirlas con un apósito para protegerlas.
Los contagiados con mpox deben mantenerse bien hidratados, comer bien y descansar lo suficiente, así como evitar estar en contacto con otras personas.
Contrario a lo que se dijo hace dos años, cuando se dio la pasada emergencia global por la proliferación de este virus, no es un padecimiento exclusivo de homosexuales o bisexuales.
A decir de la Secretaría de Salud del Gobierno de la República, los grupos vulnerables son las personas recién nacidas, embarazadas, los niños y las niñas, así como las personas con inmunodepresión, quienes no sólo tienen mayor riesgo de padecer síntomas más graves, sino incluso de de morir a causa de la viruela símica.
¿Existe alguna posibilidad de que se convierta en una pandemia del tamaño del covid?
“La viruela símica no es tan contagiosa como algunas otras infecciones, incluyendo el covid. Requiere el contacto estrecho con alguien que tenga la enfermedad, con un entorno contaminado o con un animal infectado para contagiarse”, dice la SSA.
