Parto humanizado: La elección de tener una vida más saludable

Por Javier Ramírez

El nacimiento de un bebé, evento que comúnmente conocemos como “dar a luz”, no es un tema que deba quedarse únicamente en seguir al pie de la letra las instrucciones de un médico especializado en el tema, sino que tendría que inmiscuir tanto a la madre como al padre en la toma de decisiones que tengan que ver con este importante acontecimiento.

Bien es cierto que un especialista, como un obstetra, conoce el modelo de atención que una mujer debe recibir antes, durante y después del parto, pero éste debe respetar las decisiones que las mujeres hagan sobre su alumbramiento.

En la conferencia “Parto humanizado, tú decides. La importancia del nacimiento respetado para ti y tu recién nacido”, la actriz y conductora Claudia Lizaldi, junto con los doctores Horacio Reyes y Gilberto Ramírez, indicó que es alarmante el número de casos de cesárea que se registran en nuestro país.

Es por eso que se vuelve de vital importancia promover la práctica del llamado “parto humanizado”, el cual tiene la intención de registrar menos cesáreas y así disminuir problemas de salud de las mujeres previo a su embarazo y después de éste.

De esta forma, se centra en la atención de la mujer y de su bebé, respetando sus necesidades tanto emocionales, físicas y espirituales, atendiéndolos con respeto y no interviniendo en sus elecciones (a menos de que sea sumamente necesario).

El evento, que tuvo como recinto el Teatro Sogem Wilberto Cantón y que fue presentado por Mamá Natural y “Nestlé, comienzo sano, vida sana”, tuvo la intención de crear conciencia para evitar que se lleven a cabo cesáreas innecesarias, que puede conllevar factores de riesgo para la salud de mamá-bebé.

En su participación, el gineco obstetra Gilberto Ramírez manifestó que “la humanización del parto quiere decir que desde el momento en que llegue la mujer al consultorio desde ahí se empieza a tratar a la mujer o a la pareja como un ser humano, no se trata de un número, no se trata de un ingreso económico”.

Agregó que en México existen un índice de cesáreas de 80 a 90 por ciento en hospitales privados y de 60 por ciento en hospitales públicos, muchas de ellas practicadas por decisión del doctor y no de la madre y/o pareja.

Enfatizó que la alternativa de nacimiento es decisión de cada quién, aunque es importante saber que el parto vaginal provee de flora bacteriana necesaria para el recién nacido y fundamental para el desarrollo de sus defensas.

Por su parte, Horacio Reyes subrayó que “el nacimiento de un bebé es un momento maravilloso en la vida. Un bebé que nace por parto va a tener una flora intestinal adecuada, que va a permitir que ese niño sintetice mejor vitaminas, que tenga un mejor aspecto nutritivo que un bebé que nace por una cesárea programada”.

Abundó que ésta última, en la que muchas veces no existe un trabajo de parto, no prepara al bebé para que nazca, pues no se le indica que ya está a punto de dejar el útero.

“Un bebé que nace por cesárea pero que tuvo un trabajo de parto, es diferente, su flora intestinal se va a parecer a la flora intestinal del bebé que nació por parto. Lo ideal sería tener un parto por vía vaginal”.

También anotó que ya se están haciendo estudios de colocar una gasa en la vagina de la madre y pasar la misma por las mejillas del bebé que nació por cesárea, para que tome las bacterias propias de dicha zona, y tenga los beneficios antes mencionados.

Se vuelve entonces importante la forma de nacimiento, que tiene que ver directamente con el contacto inmediato de mamá-bebé a la hora de nacer, los primeros instantes.

“Una mamá al momento de que su bebé nace, llora y exhala feromonas, esas feromonas generan un estimulo en ella, a nivel de un núcleo en la nariz, que va a enviar un mensaje eléctrico al área límbica, área no consciente de nuestro cerebro, y esto libera oxitocina, y genera el sentimiento del 'por siempre jamás', por siempre te voy a amar, jamás lo voy a dejar de hacer. Ese vínculo lo hacen las mamás por parto y lo deben hacer también por vía cesárea”.

El temor a que 'duela' el tener un bebé debe dejarse de lado, y las mujeres deben informarse adecuadamente de lo que implica elegir tener un parto de una u otra forma, en tanto que es esencial que se encuentren apoyadas por su doctor.

La lactancia fue otro de los puntos que se tocaron, en donde se resaltó la adopción de políticas públicas para que deje de verse como algo que deba censurarse a los ojos de los demás.

Lizaldi expuso que los menores deben enterarse que amamantar es una decisión de salud, por lo mismo, las madres no deberían taparse cuando enfrente de sus otros hijos le den leche a sus pequeños.

Exhortó a hacer conciencia que un pequeño o pequeña que cumple dos años como lactante, los óptimos recomendados, gozará de una vida más saludable.

Además, recordó que el tema del cordón umbilical y la preservación de las células madre es otro rubro al que debe dársele más prioridad.

Existen procedimientos que se aplican a los bebés prematuros y en los que se usa el cordón umbilical a fin de dotarle la cantidad de hierro necesaria y con la que debieron haber nacido.

Horació explicó que “hoy sabemos que cuando nace el bebé pasan (por el cordón) 80 ml de sangre extra en el primer minuto, y llega hasta los 100 ml en los primeros tres minutos. El aporte de hierro que le da al bebé equivale a 100 litros de leche materna, es enorme”.

“Para los bebés prematuros he visto que hay 50 por ciento menos hemorragia intraventricular, hay menos problemas de inflamación del intestino o de la sangre, o de que no respira bien, en fin, el impacto es enorme”.

Es por eso que se promueve que el pinzamiento del cordón no se haga de forma inmediata, pues ahí está la diferencia entre tener o no una vida mejor, tanto para la madre como para el bebé.

“Hay mucha inconsciencia en este país, esa es la verdad. Falta mucha información y hay que dársela”, puntualizó Claudia.

Al finalizar el evento, Claudia entregó a los especialistas un reconocimiento por su labor en el tema de parto humanizado (Fotos: Javier Ramírez)