Niños sonideros, orgullosos de sus raíces
Aunque son pequeños, ya saben valorar el trabajo de sus padres
Sonideros (Foto: Ilustrativa Archivo El Gráfico)
El crecer entre cables, bocinas, luces y tornamesas han llevado a los niños Óscar, Sebastián, Christofer, Daniela y Giovanni a valorar la profesión de sus padres, quienes desde hace años dedican sus vidas al movimiento sonidero.
“Me queda claro que es un trabajo muy fuerte el cual muchas veces no es valorado. Por ello es que me encantaría estudiar y tener una carrera profesional con la cual defenderme y continuar con el legado de mi padre por hobby y no por necesidad”, expresó Sebastián.
Esta disciplina le ha permitido a Óscar distinguir a la perfección el tipo de música que escucha en cuestión de segundos.
“Muchos de mis amigos se sorprenden de mis conocimientos en la música, escucho de todo pero mis gustos se inclinan más por la música tropical, en especial la salsa”, compartió.
A pesar de su corta edad, Christofer heredó el gusto por la música y cada compás que escucha le es inevitable bailar.
“Desde el vientre de su madre cada que poníamos música él se movía sin parar. Hasta la fecha es muy alegre y siempre es la sensación de todas las fiestas”, expresó su abuelo, líder de sonido Supremo.
Por su parte Daniela y Giovanni, hijos de la locutora de sonido Gatúbela, externaron su admiración por su madre al ser de las pocas mujeres sonideras.
Nancy Morán