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Si se pensaba que el mundo del espectáculo era muy cercano a las experiencias paranormales, un podcast reveló que también en la política se persiguen fines a través de rituales oscuros y uno de ellos fue revelado, donde la experiencia para la narradora aún mostró secuelas perturbadoras en su memoria.
Esta vez los hechos que se describen ocurrieron en el canal en Youtube titulado Podcast Extra Anormal, conducido por Paco Arias. Esta vez, el anfitrión de los relatos sobrenaturales entrevistó a una persona quien llamó ‘La Contadora’, para proteger su identidad real.
Dentro de los primeros instantes del videocapítulo, esta persona habló de los pactos diabólicos y rituales oscuros, también mencionó cómo a este ser lleno de avaricia y hambre de poder no le importó, supuestamente, dar en sacrificio a un niño de cuatro años para ganar un puesto público importante y como sello del pacto demoníaco, ahora esta persona, según cuenta la narradora, tiene las marcas del ritual en su cuerpo.
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A decir de La Contadora, ser testigo de estos hechos le dejó un severo trauma, por lo que su proceso de recuperación ha sido difícil, sin embargo, ahora está lista para avanzar en su proceso de sanación. Por su parte, el anfitrión destacó que la invitada mandó su correo para poder contar la historia, y el equipo del podcast llevó valorando varios meses la misiva para decidir si esto lo darían a conocer.
“Todo esto comenzó en 2014, tenía alrededor de 18-19 años. Provengo de una familia humilde donde la escasez siempre estuvo presente, pero como mujer y joven yo siempre quise vivir bien y veía amistades que vivían mucho mejor que yo y eso me causaba envidia. Por consejo de otras personas yo pensé en ganar el dinero fácil. Era pobre pero bonita, de las que llamaba la atención y me invitaron a una fiesta donde iba a haber políticos y gente de dinero”, se presentó la entrevistada.
“Un día fuimos a la fiesta y me presentaron a un señor que tenía mucho dinero. En nuestra ciudad era uno de los que tenía mayor adquisición. Había muchas personas de edad mayor y se me acercó este hombre y me dijo que él era político e iba para una campaña (se guarda los datos por su integridad)”.
Así en otra ocasión que se vieron, este hombre empezó, a grandes rasgos, a contarle de sus grandes aspiraciones en la política y que él le iba a dar lo mejor, lo que ella vio la oportunidad de adquirir grandes sumas de dinero, por lo que entró a la campaña.
Por sus conocimientos en contaduría le dieron a su responsabilidad el manejo de pagos y otras cosas administrativas.
“Pasó el tiempo y cada vez nos acercamos, pero yo quería algo más, le coqueteaba a pesar de que él tenía familia. Tenía tres hijos y eso no me importó, yo quería el dinero fácil […] Pasó el tiempo, me volví su amante y trabajamos en la precampaña. Algo que noté en él es que le llamaba la esotería, brujería, toda la rama oscura e iba mucho a Catemaco. Incluso brujos lo visitaban y eso me di cuenta por los pagos que hacía, cantidades muy grandes, de maletines de dinero”, explicó.
También dijo que varias ocasiones ella le dejó la responsabilidad porque este político se perdía y días después llegaba con una actitud que daba miedo.
“Cuando veía a estas personas llegaba diferente. Cuando estábamos en la intimidad le veía marcas en su cuerpo, pero él se negaba a compartir lo que le sucedía. Primero eran arañones, moretones en espalda y pecho”.
LA CAMPAÑA SATÁNICA
El inicio fuerte de la campaña mostró que el contrincante del político tenía más seguidores, pero le empezaron a sacar cosas para desprestigiarlo, como consecuencia, su rival sacó cosas sobre su familia que sí le pegaron.
“Se perdió como dos días y le preguntamos ¿dónde estaba’ y solo dijo que le iba a entregar dinero a cierta persona. Lo llevé a un rancho y cuando llegué -que estaba muy metido entre cerros-, salió una señora con una niña. Todo se manejaba entre secreto.
“Al principio no me sentía a gusto, pero al pasar dos o tres días, al otro precandidato lo desaparecieron. Ahí fue donde me empezó a dar miedo porque después apareció perturbado”, reveló.
Con la idea de que su amante no sería ganador en las elecciones “empecé a ver que hacía rituales. Primero fueron raros amuletos […] después empezaron a llegar personas extrañas. Un día escuché una de sus conversaciones donde uno de estos sujetos le decía que tenían qué hacer algo grande, pero que ningún brujo se atrevía a hacerlo, ya que todo logro necesitaba un sacrificio”. Aún impactada, en su relato indicó por qué nadie se atrevía a realizar dicho acto.
“No entiendo de dónde consiguieron esas personas que se atrevieron a hacer eso”, dijo entre llantos.
De esta forma, dice, llegó a un ritual en el rancho junto a dos personas más. La Contadora pensó que sería una limpia, pero el político llegó con su hijo de cuatro años. A ella se le hizo extraño que el personaje llevara al menor. Así se encontraron un círculo de velas negras y estaba la persona extraña que a él lo acompañaba y otra persona vestida diferente.
“Empezaron a hablar en otra lengua, empecé a ver como sombras y como el ambiente se tornaba frío. Las escenas de las películas se quedaron cortas. Abracé al niño porque empezó a llorar cuando siento que me lo arrebataron. Yo no quería que me lo quitaran, pero si me negaba, también me pasaría algo a mí. Se lo llevaron al círculo. Solamente vi cuando una de esas personas tomó un cuchillo y desvivió al niño. Cuando eso sucedió vi una sombra enorme con unos ojos rojos como el fuego, que se acercaban a él. Es la escena más fuerte que he visto, empecé a llorar y me tiré al suelo con la impotencia de no haber podido hacer nada”, dijo entre lágrimas.
“El candidato estaba ahí, pero no era él, era alguien más dentro de su cuerpo, pero no era él, porque su voz cambió. Era un ambiente muy pesado. Mi compañera se desmayó. Pasó lo que tenía que pasar y me advirtió que yo no había visto nada y que de esto no se iba a hablar nunca”.
Para el cierre de campaña dijo que ya no podía ver a su amante diferente, pero ella tenía que continuar para que el sacrificio de su hijo valiera la pena. Y sí, ganó la campaña política. “Me sentí una porquería de persona por ser cómplice. Muchos años me he sentido la peor persona del mundo y ahora voy a terapia para sobrellevar esto”, dijo entre lágrimas La Contadora.
“No hay relato que se describa la maldad de la humanidad”, dijo el anfitrión.
Después que hizo el pacto, el político, al mes, desapareció, lo mataron y siente que fueron las mismas personas con las que se metió, ya que su cuerpo apareció en partes. Fue así que ella logró salir de ese ritual. “Sus partes tenían marcas, símbolos de cosas que vimos en ese ritual”, recordó e indicó que el menor, en su momento fue dado secuestrado por el rival, pero la realidad, supuestamente, fue otra.
