Opinión

En Poncitlán, Jalisco, se encuentra uno de los mayores enigmas de la República Mexicana: el foco tonal. El pasado fin de semana tuve la oportunidad de estar, una vez más, allí, y me sigue impactando como si fuera la primera vez que lo visito. No tanto por el lugar, sino por lo que manifiestan las personas que acuden hasta allá en busca de curaciones y milagros y aseguran que el llamado “foquito” les ha ayudado y ha cumplido sus deseos. 

Foco tonal es un punto exacto, al aire libre, en el que uno se para y, si pronuncia alguna palabra, suena como si estuviera al interior de una cueva, con eco. 

Hay quienes aseguran que se trata de un efecto de reverberación provocado por el círculo de concreto que hay a su alrededor, aunque esta teoría no se sostiene porque, cuando el foco tonal fue descubierto, no existía esa construcción. Otros, sin embargo, no dudan en señalar que se trata de un punto de conexión energética con el cosmos. 

El sanador José Sebastián fue quien lo descubrió. Era vidente y explicaba que le mostraban el foco tonal a través de sueños, pero él, siendo de Torreón, no sabía dónde se encontraba este lugar de Jalisco y por qué tenía que llegar hasta allí.

Mas conoció a Manuel Domínguez, el dueño de los terrenos en los que se encuentra “el foquito”, y le comunicó que, en el futuro, ese sería un espacio muy especial que serviría para que mucha gente sanara. Muchas personas que lo han visitado aseguran que aquí han experimentado, por ejemplo, la desaparición de dolores y molestias o que les han cumplido deseos como tener hijos, a pesar de que los médicos les habían advertido que esto no era posible.

También refieren que aquí son constantes los avistamientos de objetos voladores no identificados y de seres luminosos, de entidades ajenas a nuestro mundo. Para los testigos, todo esto es posible porque el foco tonal sería un portal a otras realidades o un punto de conexión con el universo, en el que convergen las energías cósmicas con las del planeta Tierra.

La mayoría de personas que acuden hasta este espacio lo hacen con la intención de recargarse energéticamente o para la sanación. 

En mis numerosas visitas al foco tonal he tenido la oportunidad de presenciar el misterio que lo rodea. Allí tuve el avistamiento de un ovni con forma de esfera, de color blanco, que pasó justo por encima del foco tonal y hasta tuvimos la oportunidad de filmarlo en video. 

También es importante señalar que las zonas de campamento que rodean al foco tonal están invadidas por juguetes y diversos objetos que la gente deja a modo de ofrenda para los supuestos duendes que allí habitarían. 

Muchos aseguran que estas entidades estarían presentes en este lugar y que es posible escucharlos en mitad de la noche. Testigos han escuchado risas y juegos de niños en la madrugada, cuando allí no había ningún menor, por lo que atribuyen estas andanzas a los duendes que se acercan a curiosear las casas de campaña de los seres humanos. 

Como se observa, en foco tonal convergen muchos misterios, aunque el más importante, sin duda, es el de ese punto de energía cósmica en la que aseguran que es posible lo imposible.

Si tú también quieres vivir este enigma, puedes hacerlo con los viajes especializados en misterio que realiza la empresa mexicana Volíbolo, quienes llevan años apostando por acercar a la gente a aquellos lugares considerados como sagrados y enigmáticos.