Al interceptarlos, los uniformados solicitaron una revisión del automotor donde hallaron un refrigerador, además de que los presuntos delincuentes portaban un arma calibre 380
Una vez que se perpetró el robo, los ladrones se dieron a la fuga, pero fue en la mañana del sábado cuando los trabajadores de la tienda llegaron al establecimiento y se percataron de que existían indicios de saqueo